Los bomberos necesitan más
JeEL MINISTRO DE INTERIOR Y POLICÍA, sús Vásquez Martínez, declaró el 2024 como “Año de los Bomberos”, y en una ceremonia celebrada este miércoles anunció la ampliación del seguro de vida con una cobertura de un millón de pesos, ocasión en que el general de brigada del Cuerpo de Bomberos de San Pedro de Macorís, Luis Elías Esmurdoc, expresó que ya no son “las cenicientas de los organismos de socorro del país”.
Otras ventajas promocionadas para los bomberos fueron: 500 teléfonos celulares para estaciones con plan de internet, 500 computadoras donadas por el Ministerio de Educación, internet fijo para los municipios donde opere la Adotel (Asociación Dominicana de Empresas de Telecable) y transporte gratuito en la OMSA, Metro y Teleférico.
No cuestionamos ni minimizamos estos logros, pero es probable que los bomberos dominicanos precisen mucho más que eso para dignificar un poco su inestimable servicio.
Sucede que cada vez que se produce un siniestro de proporciones, lo que sale a flote son sus carencias personales y familiares, verbigracia el incendio que consumió la tienda Casa Mora en La Vega, en 2022, cuando fallecieron tres de ellos, y la terrible explosión en San Cristóbal el pasado 14 de agosto.
Para no abundar, sugerimos prestar atención a la serie de reportajes sobre las condiciones de los bomberos en la región norte, servidos por los periodistas de elCaribe en Santiago, en once publicaciones sucesivas desde el 5 de enero.
Como muestra están, por su importancia, Santiago con 80 bomberos para 800 mil habitantes, La Vega, con los mejores niveles organizacionales del Cibao que requiere dos nuevas estaciones, Puerto Plata con 32 y una sola estación, y Moca con apenas una estación y 24 bomberos.
La detenida lectura de estos reportajes da una idea cabal de las carencias y necesidades de estos servidores públicos.
No estamos muy convencidos de que hayan dejado de ser “las cenicientas de los organismos de socorro del país”, sino más bien de que duele y apena que solo nos acordemos de ellos y reconozcamos su importancia cuando ocurren tragedias o alguno se accidenta seriamente o pierde la vida, y solo entonces se “descubre” también que tienen familia.
Institucionalizar y profesionalizar los cuerpos de bomberos, así como dotarlos de las herramientas y equipo necesario para ejercer dignamente su labor, debiera ser una prioridad y no un tema para discursos de ocasión.
lEl síndrome de la rutina frecuentemente se apodera de la prensa y me aterra pensar que yo sea también parte del problema. La curiosidad que guía las iniciativas periodísticas que suelen hacer historia, nos abandona. Me limitaré a dos casos, uno ya viejo y otro siempre vigente, que sacudirían
CARLOS NINA GÓMEZ
¿Se activó José Francisco Peña Guaba? Parece que sí, y que ha comprendido que en política a quien se duerme “se lo lleva la corriente”. Es lo que interpreto tras leer sus recientes declaraciones en las que ratifica su adhesión a la candidatura presidencial de Leonel Fernández y la necesidad de que se oficialice -sin más dilación- la cacareada unidad de la oposición al gobierno.
Sin embargo, el contenido de este artículo, aunque con alguna variación, sigue su curso. Y finaliza con esta tercera entrega.
Peña Guaba, reconocido estratega poal país y sobre los cuales no ha habido, al parecer, ningún intento serio de investigación, ni en el pasado reciente como tampoco ahora.
El primero se relaciona con la divulgación hace años de los papeles del Departamento de Estado filtrados por el sitio de Internet denominado Wikileaks y el segundo con la supresión, cada cierto tiempo, del visado a numerosas figuras públicas, entre las que el rumor público incluye siempre a funcionarios, congresistas, políticos y empresarios.
Con respecto al primero, se recuerda que al hacerse pública la existencia de esos papeles, se informó que había alrededor de 1,600 cables sobre la República Dominicana enviados por la embajada estadounidense a Washington. A excepción de dos despachos que involucraban a dos figuras del Gobierno, publicados lítico y quien ha sido un armador de grandes alianzas que a la postre lograron victorias, en su trabajo en esta tan importante etapa electoral como que “había bajado la guardia”.
Lo certifico: La mudez de Peña Guaba, en especial en las redes sociales, se notó durante los últimos dos meses. Así lo percibí. Supe que había entrado en contradicción (¿?) con dirigentes que forman parte de la Alianza Rescate-RD.
Pero, esas contradicciones no llegaron a tener malas consecuencias. Porque Peña Guaba ha vuelto a desempeñar el positivo rol de firme aliado a la causa de su amigo Leonel Fernández. No obstante, debe entender que la política, como ciencia, no es “juego de muchachos”.
La cúpula del oficialista Partido Revolucionario Moderno, con su ambicioso proyecto de reelección, hace lo imposible para que no se pongan en su camino obstáculos que le hagan perder el poder. Tener en cuenta que la dirigencia perremeísta sabe jugar al “enemigo malo”.
A los altos dirigente del PRM, liderados por Abinader, no se les debe subestimar. Reconocer que ya han acumulado por El País, de España. y reproducidos por medios nacionales, no se conoce el contenido de los demás, ni se sabe de algún esfuerzo para determinar de qué tratan, a pesar de que la mayor parte de esa documentación está disponible en varios periódicos del exterior.
Tampoco se ha sabido de iniciativas periodísticas para revelar la identidad de aquellas personas a las que.se les ha quitado el visado, debido a asuntos relacionados con actos de corrupción, probablemente ligados al negocio ilícito del narcotráfico. La publicación de cuanto se esconde detrás de esos y otros casos es de vital importancia, debido a que se refieren a asuntos vinculados al Gobierno y es un principio fundamental de toda democracia garantizar el derecho del público a estar al tanto de lo que hacen sus gobernantes.
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