Miles de personas se reunieron en la basílica de Higüey para conmemorar el día de la protectora del pueblo católico
Entre plegarias, devoción y cumplimientos de promesas miles de personas de diferentes partes del país se reúnen en la basílica de Higüey para conmemorar el Día de la Virgen de la Altagracia.
La conmemoración del día de la Altagracia en la basílica de Higüey contó con la presencia del presidente Luis Abinader junto a la primera dama, Raquel Arbaje, y la vicepresidenta de la República, Raquel Peña, que se dieron cita en la basílica para ofrecer su devoción.
Este acto de veneración se ha realizado desde antes de que reconocieran la imagen por primera vez en 1922, durante el pontificado de Pío XI, y en 1992, cuando el papa Juan Pablo II visitó por segunda vez República Dominicana.
La celebración de la Altagracia reúne bajo el techo de la basílica desde el fun
Este es un pueblo de fe, por lo que el presidente y yo pedimos fe para salir adelante en cuanto a las decisiones” cionario más prominente hasta el más humilde ciudadano, que van en busca de la respuesta a una plegaria o del cumplimiento de una promesa.
Tal es el caso de la vicepresidenta de la República, Raquel Peña, que tras su salida del templo dijo que la República Dominicana es un pueblo de fe, razón por la que ella y el presidente piden fe para salir adelante en cuanto a las decisiones que tomen.
Historias de fe
Con una fe similar a la vicepresidenta se encontraba la señora Miguelina Pies, una humilde trabajadora doméstica que en un momento difícil de su vida le hizo una promesa a la Virgen y tras recibir una positiva respuesta cada año se da cita en la basílica para venerarla.
La señora Pie narró que mientras trabajaba en una casa de familia fue acusada injustamente de robar una pertenencia a la señora del hogar y fue en ese momento en el que clamó a la venerada virgen, “le rogué que sacara de