Destacan Luciano Pichardo deja una huella imborrable
El legado del exmagistrado Rafael Luciano Pichardo perdurará en la historia judicial del país y deja una huella imborrable en la sociedad dominicana.
Se expresó ayer en estos términos el juez presidente de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), Henry Molina, en el atrio del edificio de la alta corte, durante las honras fúnebres del extinto magistrado, quien se desempeñó como primer sustituto y juez del órgano judicial.
Frente a decenas de presentes, entre ellos familiares, amigos y compañeros del fenecido juez, el titular de la SCJ aseguró que Luciano Pichardo demostró durante su trayectoria un compromiso inquebrantable con la justicia y la legalidad.
“Hoy nos despedimos de una columna del derecho y la justicia, el magistrado Luciano Pichardo. Su legado perdurará en la historia judicial de la República Dominicana (…). Su brillante carrera está marcada por su incansable lucha por la profesionalización del rol judicial, el fortalecimiento de la justicia ordinaria y la democratización del sistema judicial”, expresó Henry Molina frente al féretro del extinto magistrado, el cual estaba cubierto por la Bandera Nacional.
El exjuez falleció el pasado domingo. La información fue dada a conocer a través de la cuenta de X del expresidente de la SCJ Jorge Subero Isa, quien lo definió como un gran amigo y un profesional de alto prestigio para la alta corte.
Las honras fúnebres
El acto para honrar el cuerpo del magistrado Luciano Pichardo fue iniciado al mediodía, con la salida del cortejo fúnebre hacia el edificio principal de la Su
prema; luego, la comisión integrada por miembros del pleno de la alta corte recibió el cortejo fúnebre y la policía judicial colocó la Bandera en el féretro. La rendición de honores siguió con los miembros de las Fuerzas Armadas, toque de atención y presente en armas. A seguidas, el féretro fue desmontado por los miembros de la Policía Judicial. La comisión trasladó el ataúd hacia el atrio principal, dejándolo allí, mientras los presentes se pusieron de pie, y a partir de ese momento se inició con la guardia de honor.
La primera guardia de honor estaba compuesta por el magistrado Henry Molina; Napoleón Estévez, juez presidente del Tribunal Constitucional (TC); Ygnacio Camacho presidente del Tribunal Superior Electoral (TSE); y la magistrada Miriam Germán Brito, procuradora general de la República.
Le siguió otras seis guardias de honor integradas por miembros del TC, TSE, SCJ y Policía Judicial.
Presentes
Los titulares de la SCJ, TC, TSE y PGR hicieron guardia de honor al féretro