Actividades educativas y culturales
Programas
Casa Vieja no se cataloga estrictamente como un museo, sino como un espacio dedicado a la preservación del patrimonio cultural y natural, así como a la promoción de actividades educativas y comunitarias, explicaron los hermanos Pantaleón, quienes agregaron que en esta primera etapa fue habilitada como espacio de exposiciones de arte y celebraciones culturales que fortalezcan los valores nacionales.
“En Casa Vieja 1923 realizamos exposiciones fotográficas con temas culturales y ambientales que sirven como oportunidades para educar y motivar a jóvenes de la provincia Hermanas Mirabal y de todo el país a valorizar nuestra identidad cultural y a la conservación de nuestras especies endémicas”, manifestaron los hermanos Pantaleón.
Dentro de las actividades que se han llevado a cabo destacaron la celebración del centenario de la casa, de la mano de las exposiciones fotográficas “Mariposas de la Patria” del fotógrafo José M. Pantaleón y “Carnaval Dominicano: Los colores de nuestra identidad”, del también fotógrafo de carnaval dominicano Mariano Hernández, entre otro eventos.
Según explicaron, en estos 4 meses de fundación, Casa Vieja ha recibido más de 500 visitantes entre fotógrafos, ambientalistas, estudiantes, investigadores, folcloristas, autoridades culturales, entre otras personas identificadas y comprometidas con el rescate de los recursos y valores comunitarios y culturales.
“Todas las acciones que emprende y emprenderá Casa Vieja tienen esencialmente un componente educativo, por ello su relación con los centros de educación, tanto públicos como privados son una prioridad”, afirmaron los hermanos Pantaleón, y testificaron que “nos proyectamos como un espacio que agrega valor a estas instituciones educativas, donde grupos de estudiantes de diferentes edades puedan reforzar conocimientos en agroecología, patrimonio cultural y ambiental y fortalezcan su compromiso con nuestros valores comunitarios y nacionales.
Asimismo, añadieron que contemplan iniciar actividades educativas de reconexión con la naturaleza, orientadas a jóvenes y niños; además de temas de bienestar físico y mental con talleres y conversatorios sobre alimentación saludable y técnicas para la práctica de yoga.
Breve historia de la familia Pantaleón Pantaleón
En la perspectiva histórica, a mediados del siglo XVIII se documenta que un hombre de nacionalidad canaria y una mujer taína establecieron una relación que dio como resultado el nacimiento del primer Pantaleón conocido en el país: Manuel Santamaría Pantaleón, un mestizo. Posteriormente él contrajo matrimonio con Cayetana del Villar, hija de una mujer taína, y en 1786 tuvo a su hijo Bernardo Pantaleón del Villar, conocido como Nando.
En 1807, a los 21 años, éste contrajo matrimonio con María Tejada, según los registros de los “Documentos Eclesiásticos de Santo Domingo”, ubicados en La Vega. Su residencia se registró cerca del Camino Real entre Rincón de Macorís y Moca, entre los ríos Cenoví, Platanar y Arroyo Caña. La pareja fundó la Comunidad de Conuco, que en lengua taína significa “huerto o labranza”.
De la unión de Nando y María nacieron 10 hijos, 6 mujeres y 4 hombres, incluyendo a Faustino Pantaleón Tejada, tatarabuelo de Rafael Nicolás, Lourdes Cecilia, Naty y Ramón Manuel Pantaleón, quien contrajo matrimonio con Manuela María.
Esta pareja también tuvo 10 hijos, 6 hembras y 4 varones, entre ellos los bis
abuelos Faustino Valerio y Pedro Pantaleón María. En la década de 1890, Faustino Valerio Pantaleón María (Papá Vale) se casó con Juana Pio de la Cruz (Mamá Pio) con la que procreó a 7 hijos, 4 mujeres y 2 hombres, incluyendo al abuelo Manuel (Ney Pantaleón) y Faustino Valerio (Tino). A pesar de la prematura muerte de Tino, los dos hermanos criaron a sus hijos en estrecha proximidad, generando la impresión de una familia unida. Tras enviudar tempranamente, Mamá Pio, bisabuela de los hijos de Vir
gencita Pantaleón, recibió apoyo de Ney, quien construyó su casa frente a la de ella para ayudar en la crianza de la familia.
Al unirse en matrimonio con María Virgen Mena Pantaleón, Ney y Virgen fueron bendecidos con 6 hijos, compuestos por 2 varones y 4 mujeres, entre los cuales se destacan el tío Manuel y nuestra madre Virgencita, quien trabajó por muchos años como educadora en la escuela y el liceo de la comunidad. Estos decidieron establecer sus hogares en el mismo entorno que los vio crecer, donde han sido testigos del crecimiento de sus hijos y nietos.