Que no se pierda ni una hora de clase
Hoy inician las clases correspondientes al año lectivo 2018-2019. La comunidad estudiantil de República Dominicana ha sido convocada por el Ministerio de Educación a integrarse a las labores que supone el aprendizaje en cada uno de los niveles: desde Inicial hasta la Secundaria.
En La Altagracia, cerca de 80 mil estudiantes deberán iniciar un nuevo curso, distribuidos en los diversos centros educativos tanto públicos como privados. No perder ni una hora de clase, es una tarea conjunta que deberán ejecutar las autoridades del Ministerio de Educación, el cuerpo docente, alumnos, padres y tutores.
Hay que iniciar con entusiasmo, pese a las dificultades que aún puedan tener las autoridades en tanto la reubicación de estudiantes en las escuelas del Estado, sobre todo las que están integradas al programa de Jornada Escolar Extendida. Es necesario que todos estén en las aulas desde hoy mismo, con entusiasmo y mucha alegría, ya que la educación es la columna principal del desarrollo de los individuos.
Y, es que, el inicio de un año escolar debe ser una experiencia motivadora, que llene de alegría y entusiasmo a niños, niñas y adolescentes, para que asistan con interés a desarrollar su objetivo principal, que es aprender.
Lo mismo debe ser para los alumnos que forman parte de los programas diseñados para adultos, modalidades semipresenciales, como es el caso de Prepara y Quisqueya Aprende Contigo.
El llamado está hecho. A nivel nacional ya hizo el ministro de Educación, Andrés Navarro, y a nivel de cada una de las regiones los directores; como en el caso de La Altagracia, Lucas Jiménez. Ahora toca a los padres y tutores que los estudiantes estén presentes desde el primer día de clase.
Para este año escolar normarán nuevos uniformes por región. Estos artículos serán entregados de manera gratuita a los estudiantes, por lo que no será necesario que sean adquiridos en ningún establecimiento comercial.
Animamos a los actores del sistema educativo nacional a integrarse como un solo equipo, y no permitir que en los centros educativos se pierda ni una hora de clase.