MICHEL CAMILO
EMBAJADOR DEL JAZZ
Para el painista dominicano Michel Camilo la evolución en la música es un tema de prioridad. Hoy que veteranos merengueros han generado un debate, a propósito de si lo que hacen algunos intérpretes urbanos es merengue o no, el músico criollo radicado en Estados Unidos hace algunas aclaraciones en torno al tema, desde su perspectiva musical y la experiencia de más de 25 años de carrera.
“La música es una evolución, no se puede quedar en una sola cosa”, aseguró el jazzista cuando se le preguntó si estaba de acuerdo con los cambios que ha sufrido el ritmo que nos representa. Sin embargo, considera, al igual que Johnny Ventura, que esos nuevos estilos musicales que surgen partiendo de fusiones y experimentos deberían llevar otro nombre, por ejemplo; nuevo merengue. Recordó que lo mismo sucede en el jazz, ritmo en que los diferentes estilos deribados del patrón de origen han tomado vida bajo alguna denominación, (Latin jazz). “En Holanda vi un cuadro con un árbol frondoso. El tronco tenía la palabra jazz y en las ramas estaban los nombres de los diferentes estilos musicales como latín jazz, chicago blues y cada estilo tenía sus artistas, pero todos eran parte del gran árbol que se llama jazz. Eso pasa con el merengue, simplemente hay que tener la mente abierta y que el progreso siga”, aclaró a LISTÍN DIARIO el músico, quien el próximo 13 y 14 de febrero estará en concierto en el Teatro Nacional eduardo Brito y en el Gran Teatro del Cibao.
Aunque está de acuerdo con la evolución de los ritmos y, en especial del meregue, revela que dentro de los progresos que tiene cada ritmo o género musical hay riesgos y oportunidades. “El riesgo está en experimentar, a veces sale bien y otras veces sale mal, pero la oportunidad está en que haya nuevos caminos, nuevos estilos y que el ritmo no se anquilose, nuevas vertientes”, sostuvo el músico, quien fue declarado por el Wiener Konzerthaus de la ciudad de Viena como Artista en Residencia para la temporada 2016-2017.
Camilo hace una recomendación, y es que al experimentar los cambios con el merengue es bueno que los músicos se concentren más en la armonía, para que no sufra por el ritmo, “no nos concentremos nada más en el ritmo”, dice al tiempo que aclara que ese aspecto le ha garantizado el éxito a Juan Luis Guerra.