Grecia insatisfecha con la propuesta solución de deuda
La solución presentada incluía, para el Gobierno y para otros socios europeos, disposiciones ambiguas.
El Gobierno griego afirmó ayer que la propuesta de solución presentada en el Eurogrupo del lunes para el alivio de la deuda del país no era satisfactoria y que por eso se prefirió aplazar la decisión para alcanzar un acuerdo claro.
“La solución presentada incluía, para el Gobierno y para otros socios europeos, disposiciones ambiguas y el riesgo de eternizar el debate sobre la deuda, lo que no se corresponde con los sacrificios del pueblo heleno ni con los compromisos de los acreedores”, destacó el portavoz del Ejecutivo, Dimitris Tzanakópulos, en su rueda de prensa semanal.
El portavoz recalcó que “el Gobierno prefirió prolongar la negociación unos días para alcanzar un acuerdo sobre el alivio de la deuda, claro, sin ambigüedades”, que permitirá al Fondo Monetario Internacional (FMI) participar completamente en el rescate de Grecia.
“Hemos cumplido nuestros compromisos, es la hora de que hagan lo mismo todos los socios europeos”, aseveró Tzanakópulos, quien se mostró optimista de que para el próximo Eurogrupo, del 15 de junio, haya acuerdo.
Tzanakópulos precisó que en los próximos días habrá que buscar un acuerdo entre el ministerio de Finanzas alemán y el FMI.
“La participación del FMI no puede ser ‘a la carta’. No se puede apoyar las reformas que reclama pero no aceptar su exigencia para el alivio de la deuda”, subrayó el portavoz gubernamental.
Con ello aludió a Alemania y otros países que exigen la participación del FMI en el programa de asistencia, pero no están dispuestos a atender su petición de un mayor alivio de la deuda helena.
Tzanakópulos sostuvo que si al final el FMI decide no participar en el programa, “será necesario revisar” el actual.
En este contexto, Tzanakópulos recordó que, si no hay acuerdo sobre la deuda, Grecia no aplicará los recortes de pensiones y el incremento de la presión fiscal aprobados por el parlamento heleno la semana pasada a partir de 2019 y 2020, dos medidas que se hicieron por exigencia del FMI.
El responsable del FMI para Europa, Poul Thomsen, señaló que el organismo que representa no exige que se definan inmediatamente las medidas de alivio que se aplicarán al final del programa, pero sí una mayor especificación de la senda fiscal para ese período.
“Todavía pensamos que es necesario más realismo y detalle en las previsiones”, destacó Thomsen.