Listin Diario

La oposición en el CNM

- Para comunicars­e con el autor orlandogil@claro.net.do Orlando Gil

DOCTRINA URIBE.-

El riesgo y el temor es que en el Consejo Nacional de la Magistratu­ra se aplique de manera implacable la doctrina Uribe. La de Nano cuando fue presidente del Senado en los tiempos de Joaquín Balaguer. A saber: “A la oposición se le escucha, se le aplaude y se le aplasta”. En las transmisio­nes se vio que el gobierno no solo le ponía el pie en el estribo a la oposición, sino que la dejaba cabalgar a sus anchas. Claro, era en la calle, y en la calle conviene ser luz. No se sabe si en casa, fuera de cámaras, las sombras se apropiaron del escenario. El senador José Paliza y la diputada Josefa Castillo podrían no tener quejas. Quisieron nuevo reglamento, y las audiencias se celebraron con nuevo reglamento. Que el consultor Jurídico no era miembro del CNM y no podía hacer de vocero, no hubo problema. Flavio Darío Espinal quedó fuera de los focos. Que se necesitaba el auxilio y las ocurrencia­s de las redes sociales, se permitió a Twitter ocupar un asiento en la mesa y hacer las preguntas que consideró pertinente­s. E incluso una participac­ión estratégic­amente valiosa ante el deficiente empuje de la barra opositora. El interrogat­orio en ocasiones se hizo desear…

LA INSUFICIEN­CIA.-

No quedó dudas a los televident­es que las barras gobierno y oposición no se prepararon convenient­emente para el trabajo examinador. Faltaron preguntas, muchas eran vagas y las respuestas eran aceptadas sin insistir en la ciencia o en los procedimie­ntos. La materia electoral, quedó demostrado, no fue el fuerte de ninguno de los integrante­s del Consejo Nacional de la Magistratu­ra, a menos que se sintieran intimados por los tantos diplomados y maestrías de doble titulación de los comparecie­ntes. El televident­e tiene que haber replicado en su casa la situación del pasajero que se fastidia ante el manejo torpe del conductor. Que de tanto frenar y acelerar en el vacío siente dolor en las piernas. Cualquier reportero que cubra la fuente de la Junta o del Tribunal hubiera llevado a cabo esa tarea con más suficienci­a y provecho. Si el examen es malo, el graduando no podrá llenar las expectativ­as…

ADEMÁS DE TANGENTE.-

El propósito no era descalific­ar y dejar fuera a los actuales titulares, sino hacer una escogencia adecuada y que corrigiera las faltas que se denuncian. Los malos demostraro­n conocer la materia electoral y sobre todo –con estadístic­as y comparacio­nes– que su desempeño no fue tan perverso. Ellos deberán irse, porque fue mucho el ruido, y conviene descansar al gobierno y a la oposición, pero no porque la parcialida­d los llevara a cometer indelicade­zas. Los que lleguen, y cuando sea el momento, tendrán poco o mucho de lo mismo. Deberán apurar esa cicuta, pues es parte del todo. No obstante, y es lo que merece resaltarse, hubo más afán en evitar que los magistrado­s sobrevivan que selecciona­r un personal más apropiado. Y las historias menudean, y todas evidencian un forzamient­o de la circunstan­cia. El Consejo Nacional de la Magistratu­ra debió haber sido Consejo Nacional de la Magistratu­ra, pero hubo monitoreo de por medio, e incluso titiritero…

VÍSTEME DESPACITO.-

Las objeciones son objeciones, y una debe ser igual que mil. A Jorge Subero Isa lo sacaron de juego con Sund Land, y él fue presidente de la Suprema Corte de Justicia, pero no la Suprema Corte de Justicia. Fue víctima de la maldad de uno, con derecho o sin derecho para llevar a cabo el cometido. Contra el Tribunal Superior Electoral se recibieron 30 objeciones, pero no todas de conjunto, sino que algunas tenían nombres y apellidos. En uno de los intercambi­os entre un postulante y la barra de la oposición, este aludió a un documento de partidos al que le faltaban firmas. La diputada Josefa Castillo aclaró que esa situación se debió a la prisa y que todo el Bloque aprobaba ese emplazamie­nto. Sin embargo, esa prisa tiene su historia. Cuando el CNM hizo el corte y redujo la lista, la oposición quiso dejar fuera al Tribunal, pero en particular a John Guilliani. La barra del gobierno decidió mantenerlo. Entonces fueron con la voz al líder, este movió las fichas y se preparó el comunicado a la carrera, y era más importante que llegara a que tuviera todas las firmas. Este Guilliani sí ha dado agua que beber…

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Dominican Republic