Montan vigilancia en Yaque del Norte
El ministerio de Medio Ambiente, la Alcaldía de Santiago y la Policía Ambiental, con colaboración de ecologistas, juntas de vecinos y otros sectores, han desplegado labores de vigilancia en la cercanía del río Yaque del Norte, para evitar que se levanten asentamientos humanos que pongan en peligro la persistencia de esa importante fuente de agua.
Eduardo Rodríguez, ministro de Medio Ambiente en la zona Norte, con asiento en Santiago, declaró que preservar y proteger el Yaque del Norte es “una tarea de todos los sectores del país y la región”.
Recordó que la Alcaldía local y Medio Ambiente desalojaron a comerciantes y familias en particular que tenían negocios y casas casi en el caudal de ese río en el barrio Nueva York Chiquito, de la Avenida Circunvalación Sur en Nibaje.
Según el funcionario, se están tomando acciones responsables para reducir la contaminación del río Yaque a su paso por Santiago y otras provincias.
En lo que corresponde a Santiago, la mayoría de los agentes contaminantes provienen de aguas residuales y desechos sólidos vertidos en cañadas que desembocan en esa fuente acuífera.
Pero también, el importante río sufre con efectos demoledores la contaminación de algunas empresas que se encuentran en su cercanía.
En lo que tiene que ver con las provincias de Valverde, Monte Cristi y parte de Dajabón, la mayoría de los contaminantes del Yaque del Norte proviene de productos químicos que se aplican en parcelas agrícolas.
Por igual agregó que implementan un programa de instalación de plantas de tratamiento y que están traba- jando con los industriales y empresarios que tienen empresas en la cercanía del Yaque del Norte para que instalen sus procesadoras de contaminantes, sobre todo de aguas residuales.
También están trabajando con los asentamientos precarios a orillas de cañadas y arroyos que desembocan en ese río.
Igualmente informó que están evitando nuevos asentamientos y que como parte del proceso, están reduciendo y tomando medidas preventivas para que no se construyan nuevas viviendas en los cursos de agua que desembocan en el Yaque.