PARA EMBARAZADAS

Durante el embarazo están permitidas las actividades físicas que no presenten riesgos para el bebé. Se suele recomendar no iniciar un programa de entrenamiento que no hayas practicado antes. Sin embargo, el Pilates es un método seguro para futuras madres ya que no tiene movimientos de impacto y se realiza en una superficie estable. Los principios en los cuales se basa el programa aportan beneficios especiales para las mujeres embarazadas, como: • Fortalecimiento de la pared abdominal, lo cual previene la separación de los músculos de esa zona y ayuda a que los mismos vuelvan a su posición original luego del parto. •

Disminuye la curva lumbar debido al peso de la barriga y mejora los dolores de espalda.

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Ayuda a la relajación y a la concentración por medio de la respiración.

• Fortalece los brazos y piernas.

• Mejora el sueño.

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Aumenta la resistencia.

• Mejora la circulación previniendo la retención de líquidos. ¿Dónde?

Puedes encontrar las clases de Pilates en las grandes cadenas de gimnasios, así como también en centros especializados.

Si tienes un horario restringido puedes optar por un instructor que ofrezca las clases a domicilio. No se requiere de ningún elemento específico, ni de máquinas especiales, aunque en los centros que se dedican a este método en su totalidad, tendrás la oportunidad de tomar la clase con los equipos funcionales que utilizaba su creador. Este programa de entrenamiento no tiene límites de edad, ni requiere de ningún conocimiento, agilidad o experiencia previa para practicarlo.