(( Reino Unido Opera ofrecerá entradas baratas
La Royal Opera House londinense ofrecerá a partir de 2020 entradas a precios muy económicos para aficionados que estén dispuestos a estar de pie o a sentarse en el suelo, informó el periódico The Daily Telegraph.
El nuevo director artístico, Oliver Mears, explicó que la iniciativa, que concibió en la década de 1970 el entonces director musical Colin Davis, forma parte de un proyecto de transformación de la institución para hacerla más accesible al gran público.
Las entradas con descuento, que tendrán un precio de unas 10 libras (casi 13 dólares), permitirán estar de pie o sentarse con mantas de pícnic en el palco de platea del teatro, de donde se retirarán los cómodos asientos en una operación logística que se calcula durará unas doce horas.
Estas entradas sin asiento asignado, que se conocerán como “conciertos Proms”, se pondrán a la venta durante una semana concreta de la temporada operística, en la que tendrán lugar funciones de todo tipo.
Mears declaró al diario que la idea de resucitar los conciertos Proms de ópera vino porque “plantea la oportunidad de ofrecer un gran número de entradas a precios muy bajos”.
El director artístico, que llegó al cargo en 2016 con solo 37 años, dijo que una mayor accesibilidad a las funciones servirá también para eliminar prejuicios.
“La gente cree que la ópera es muy formal y estirada”, afirma. “Claro que a las personas les gusta vestirse para la ocasión y eso puede ser parte del acontecimiento de ir a la ópera, pero nadie debería sentirse intimidado por ello”.
La Royal Opera House, que está haciendo reformas internas para mejorar sus instalaciones, busca un patrocinador para este tipo de entradas más económicas. El porcentaje de estadounidenses que se identifican como blancos y cristianos ha caído por debajo del 50%, una transformación alimentada por la inmigración y por el creciente número de personas que no participan en religiones organizadas, según un nuevo sondeo.
Los cristianos en general siguen siendo una gran mayoría en el país que abarca en torno al 70% de la población. Pero los cristianos blancos, antes predominantes en la vida religiosa de Estados Unidos, suponen ahora solo el 43% de la población, indicó el Public Religion Research Institute, o PRRI, una encuestadora con sede en Washington. Hace cuatro décadas, en torno a ocho de cada 10 estadounidenses eran cristianos blancos.
El cambio, que ha tenido impacto en todo el espectro de iglesias cristianas en el país, incluye bruscos descensos en la membresía en grandes denominaciones protestantes de mayoría blanca como los presbiterianos y luteranos; una creciente presencia de latinos en la Iglesia católica, que también ha perdido fieles blancos, y una congregación menguante de evangélicos blancos, que hasta hace poco se percibían como inmunes al declive.
Las tendencias identificadas en el sondeo alimentan la ansiedad sobre el lugar de los cristianos en la sociedad, especialmente entre los evangélicos, alarmados por el apoyo al matrimonio homosexual y por el hecho que cada vez más estadounidenses —en torno a un cuarto— no se identifican con ningún grupo religioso.
El presidente Donald Trump, que durante su campaña prometió varias veces proteger la libertad religiosa de los cristianos, recibió un 80% de apoyo entre los votantes evangélicos blancos, que siguen estando entre sus seguidores más fieles.