Más que rivales UN EQUIPO DE TRABAJO ¿
Un ambiente laboral sano entre los compañeros de una oficina se traduce en un deseo de cooperación y mejora de forma conjunta en las tareas diarias, evitando el agotamiento físico y emocional
Eres de los que llegan a la oficina y no se sienten en comodidad?, ¿Tienes mal humor cuando te toca desempeñar una labor junto a otro empleado?, ¿No quieres comer con nadie en tu hora de almuerzo?, ¿Estás loco porque llegue la hora de irte a casa? Si tus respuestas han de ser un sí, es muy probable que estés experimentando el amargo sabor de no contar con relaciones laborales saludables.
Trabajar en un lugar donde se siente la falta de compañerismo, el desacuerdo y la incomprensión evita factores determinantes a la hora de contar con la concentración que se necesita para desarrollar eficazmente las labores del día a día.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha considerado que un trabajo saludable es aquel en que trabajadores y directivos colaboran en el uso de un proceso de mejora contínua para proteger y promover la salud, la seguridad y el bienestar de todos los recursos humanos, así como la sostenibilidad del lugar.
Esto gira en una ecuación en la que los empleados que se lleven mal entre ellos acumularán una suma de factores negativos como el caos, la tensión, las malas vibras y la presión, y en algunos casos hasta el egoísmo.
Al ser consultada por LISTÍN DIARIO, la psicóloga Ana Simó, entiende que cuando en una empresa existe un ambiente laboral sano, las dinámicas fluyen mejor, hay un mayor compromiso con la empresa y sus colaboradores, cada persona, se siente motivada a realizar su labor.
“De este modo nadie estará enfocado en aplastar al otro para lograr su objetivo”, expresa Simó, quien agrega que una oficina cargada de sentimientos negativos no sólo afecta en lo físico y lo emocional, sino que también genera ansiedad y otras enfermedades como la gastritis, la migraña, el trastorno del sueño y los trastornos gastrointestinales, el estrés, entre otras.
Para evitar los malentendidos, comunicarse unos con otros los desacuerdos es lo más recomendable. Al respecto, la terapeuta familiar y de pareja destaca que la manera correcta es haciéndolo directamente, sin la necesidad de un tercero, donde las expresiones sean sin ataques ni ofensas.
La también directora del Centro Vida y Familia Ana Simó, aconseja que solo se requiera a una tercera persona si no se logran poner de acuerdo los involucrados en la problemática, pero ya cuando un compañero no está dispuesto a conservar la paz en la oficina “se debe involucrar al superior y trazar lineamientos para que entienda que si no los acata, no podrá seguir en la entidad”.
De igual modo, los dueños de compañías deben fomentar el trabajo en equipo entre sus empleados con el objetivo de lograr mejorar su desempeño con mayor productividad y compromiso entre todos. Los departamentos de Comunicación Interna y Recursos Humanos juegan un papel fundamental en esta ardua labor de integración de personal.