Innovación educativa ¿necesidad o moda?
(+) Unibe está realizando una tertulia dialógica con directores de colegios para analizar desde un punto de vista formativo, la innovación en las aulas.
En el libro ‘La enseñanza en la Era Digital’, Tony Bates define los entornos del aprendizaje como las diversas ubicaciones físicas, contextos y culturas en las que los estudiantes aprenden.
Así que, los estudiantes pueden aprender en una amplia variedad de entornos, por ejemplo: al aire libre, dentro o fuera de la escuela, camino a casa, en el centro comercial, etcétera.
El término se utiliza a menudo como una alternativa más amplia para el concepto de aula, que tiene connotaciones más limitadas y tradicionales como el espacio con escritorios y pizarra, por explicarlo de algún modo. La tecnología no escapa a esta contextualización. Con frecuencia decimos que los nativos digitales, esa generación de jóvenes que está presente en nuestras aulas (no importa el nivel educativo de que se trate) viven hiperconectados y tienen unas destrezas increíbles con el manejo de los dispositivos móviles y la internet.
Y es cierto, los vemos manejar los equipos con una agilidad envidiable, mientras al otro lado del salón, los docentes observan tímidamente cómo tanta ‘modernidad’ los abruma. En ese sentido, las autoridades de la Universidad Iberoamericana (Unibe), consciente de su responsabilidad en el sistema educativo dominicano, está realizando una tertulia dialógica con directores de colegios, para analizar, desde un punto de vista formativo, la innovación en las aulas.
Es necesario que las instituciones educativas tomen en cuenta los entornos virtuales como escenarios de aprendizaje que permiten generar en los estudiantes las competencias que requieren para desenvolverse de manera eficiente en el entorno laboral al que van a insertarse.
No se trata de utilizar tecnología como una moda, sino de implementarla con una intencionalidad pedagógica que permita lograr el desarrollo de competencias, para lo cual los docentes deben estar formados en estrategias didácticas, herramientas tecnológicas y técnicas que les capaciten en la gestión de los diferentes entornos de aprendizaje.
Esto con la finalidad de que los docentes fortalezcan sus destrezas y afiancen su seguridad frente a una generación de estudiantes que, si bien es cierto domina de manera lúdica las tecnologías, no menos cierto es que, no saben utilizarlas para un proceso de aprendizaje formal.
Tener esto, nos permitirá tener en las aulas docentes sin temor cuando algún estudiante abra el buscador de internet para validar lo que se está compartiendo en el aula.
La tecnología vino para quedarse y es tarea de los docentes el abrazarla, sin temor a morir en el intento.