De alta luego de la cirugía
Hoy quiero refrescarles las recomendaciones imprescindibles para un resultado eficaz luego de la cirugía. Debes tener en cuenta que el mayor malestar postquirúrgico será durante las primeras 72 horas. En este tiempo toma tus medicamentos como se te instruya (antibióticos, analgésicos, protectores del estómago y vitaminas). Después de este tiempo el malestar irá disminuyendo y entonces reducirá la medicación para el dolor. Si tomas medicamentos para alguna enfermedad, debes tomarlos como siempre lo has hecho, con la previa autorización de tu cirujano. Jamás te automediques. Debes comer comidas de fácil digestión como gelatina, jugos sin leche y sopas claras, ya que suelen ser de mejor tolerancia en las primeras 24 horas. Si no presentas náuseas, vuelve a tu alimentación habitual. No debes realizar ningún tipo de dieta hasta que hayas completado tu proceso de recuperación. Los nutrientes en las primeras etapas son vitales para la cicatrización. Después de la cirugía, puedes esperar un poco de dolor, inflamación y drenaje de la herida por algunos días. No debes retirar los apósitos (productos sanitarios empleados para cubrir y proteger una herida). Tampoco debes mojar la herida quirúrgica hasta que se te indique. Recuerda que no es permitido que una persona diferente del médico haga curación a la herida quirúrgica. Una vez llegues a la casa podrás caminar en ella, ir al baño y sentarte a comer siempre apoyada en otra persona (los primeros tres días). Los siguientes días el paciente debe caminar. Quedarse acostado aumenta el riesgo de formación de coágulos, los cuales pueden afectar los pulmones y tener un desenlace fatal. Debes iniciar los masajes a la indicación del médico. Nunca permitas que otras personas te realicen punciones para drenar. Debes usar camisillas blancas de algodón, sin mangas, por debajo de la faja para disminuir los riesgos de quemaduras. Usar la faja por un período de tres meses todo el día, luego tres meses 12 horas al día. Una vez que el proceso haya terminado, deja que el dolor decida tus movimientos. Si duele, no lo hagas. Puedes regresar a tus actividades habituales luego de tres semanas. Después de la cirugía, los ejercicios cardiovasculares deben hacerse cuatro semanas luego del postquirúrgico. Existen señales de alerta que debes tener en cuenta:
1. Dolor severo que no responde a la medicación
2. Dolor e inflamación excesiva, secreciones fétidas o sangrado
3. Inflamación marcada y dolor de miembros inferiores
4. Dificultad para respirar
5. Fiebre, zonas rojas y muy calientes
6. Incapacidad para permanecer de pie, paciente muy soñoliento, que no responde al llamado.