Estados Unidos y Panamá fueron sorpresas disímiles
Estados Unidos quedó fuera por primera vez en tres décadas. Panamá logró una clasificación histórica. Y México recuperó la supremacía de la zona.
Nadie puede decir que la eliminatoria mundialista de la CONCACAF peca de predecible.
La eliminación de Estados Unidos el martes con un revés por 2-1 en Trinidad, combinado con los triunfos de Honduras y Panamá, fue la gran sorpresa que dejó el cierre del hexagonal final de la región de Norte, Centroamérica y el Caribe. Los estadounidenses habían acudido a todas las citas mundialistas desde 1990.
Panamá, por su parte, se clasificó al Mundial por primera vez gracias a un gol agónico para vencer por 2-1 a Costa Rica, y el triunfo de Honduras por 32 sobre México que mandó a los catrachos al repechaje contra Australia.
México encabezó la tabla con 21 puntos, aunque fracasó en su intento por terminar invicto al perder en la última fecha. Costa Rica (16) y Panamá (13) redondearon el trío de equipos de la zona con el boleto asegurado a Rusia, Honduras (13) disputará el repechaje, y Estados Unidos (12) y Trinidad (6) quedaron marginados.
Antes de arrancar la última fecha, el único equipo que controlaba su destino para clasificar directamente a Rusia era Estados Unidos. Un empate ante el eliminado Trinidad y Tobago les bastaba para unirse a México y Costa Rica.
“Estamos decepcionados, teníamos todo a favor y no hay excusas”, dijo el entrenador Bruce Arena. “Es una mancha para nosotros, no deberíamos estar en casa para la Copa del Mundo, acepto toda la responsabilidad”.
Arena relevó en el cargo a Juergen Klinsmann en la tercera fecha del hexagonal luego de perder ante México en casa, algo que no sucedía desde hace 44 años, y una paliza de 4-0 de visita ante Costa Rica.