NUEVO CLIMA LABORAL
Una vez se tiene contemplado el cambio de empleo es momento de iniciar un protocolo correcto para la renuncia, con el objetivo de culminar una etapa de la mejor manera posible y no manchar el historial laboral. Al mismo tiempo de tener la mejor de las actitudes al iniciar un proceso de adaptación en su nuevo lugar de trabajo.
Al ingresar a un nuevo ambiente laboral se debe tomar en cuenta la cultura organizacional de esa nueva organización, esta se refiere a la forma de vida de la organización en todos sus aspectos, sus ideas, creencias, costumbres, reglas y técnicas. Esta es la manera institucionalizada de pensar y de actuar, así lo expone Amauris Fabián Mota, psicólogo industrial.
El experto de la conducta hace mención del escritor Idalberto Chiavenato, el cual plantea que el nuevo empleado debe renunciar a cierto grado de su libertad de acción para ingresar en ella y seguir sus preceptos internos, pues debe estar de acuerdo con obedecer un horario de trabajo, desempeñar una actividad determinada, seguir la orientación de su gerente inmediato, cumplir las reglas y reglamentos internos.
La adaptación del comportamiento del individuo a sus expectativas y necesidades será de vital necesidad para un óptimo desarrollo de las funciones y crear una situación de trabajo que le proporcione satisfacción y le permita alcanzar sus objetivos personales. Se trata de un proceso doble, en el que cada una de las partes trata de influir y de adaptar a la otra a su propósito y conveniencia.