RENUNCIA DE HARIRI CREA CRISIS LÍBANO
La inesperada dimisión del que fuera primer ministro libanés, Saad Hariri, cuando se encontraba de viaje en Riad ha desencadenado una crisis que hoy enfrentó a líderes políticos y religiosos ante el papel desempeñado por Arabia Saudí.
El grupo chií Hizbulá, aliado de Irán y formación con mayor influencia en el Gobierno que hasta ayer encabezaba Hariri, acusó directamente a Riad no solo de haber “impuesto” la renuncia del primer ministro, sino de haberle “escrito” el texto de su declaración, que calificó de “muy dura”.
“La dimisión de Hariri nada tiene que ver con la situación política interna del Líbano. No es verdad que los ministros le imponían condiciones. El motivo procede de Arabia Saudí”, afirmó el líder de Hizbulá, Hasan Nasralá. En su discurso de renuncia, Hariri criticó el “tutelaje” que Irán ejerce sobre la política libanesa a través de Hizbulá y a este grupo le echó en cara el uso de las armas para imponer su política tanto en el Líbano como en Siria, donde apoya militarmente al presidente Bachar al Asad. Nasralá negó la existencia de una amenaza contra la vida de Hariri, otro de los argumentos que esgrimió el entonces primer ministro al anunciar su salida del Gobierno, y atribuyó la crisis a un intento saudí de “crear una atmósfera de tensión en el Líbano”.