DENUNCIAN QUE MIL MAESTROS IMPARTEN CLASES SIN COBRAR
(+) El dirigente magisterial dijo que las autoridades solo se concentran en entregar computadoras, pero descuidan la falta de aulas y butacas en el sistema educativo nacional.
La corriente magisterial “Don Pedro Mir” de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) deploró que aún hay mil maestros bloqueados en la nómina del Ministerio de Educación en todo el país, pese a que están impartiendo docencia.
El presidente de la corriente, Miniel Pérez Méndez, lamentó que las autoridades se han concentrado en “varillas y cemento” así como en entregar dispositivos electrónicos a los estudiantes, cuando hay dificultades en los centros educativos, como falta de butacas y espacios para la docencia.
“Creen que con una computadora vamos a resolver el problema educativo, creen que va haber calidad de educación cuando el salario de un profesor está por debajo de mil dólares, solo se han concentrado en varilla y cemento y los estudiantes y los profesores los han dejado a un lado”, indicó Pérez Méndez.
Agregó que la propuesta al Ministerio es que se haga un aumento significativo a todo el magisterio y que se coloquen las butacas necesarias en las aulas, así como habilitar más espacios en los centros de jornada escolar extendida.
Citó como ejemplo las escuelas Josefa Medina en Independencia, José Francisco Peña Gómez en Guayabal y el centro educativo Catalina
LOS PENDIENTES
Bloqueo:
que menos de 200 maestros aún permanecían bloqueados en la nómina del Ministerio de Educación. Pou en Cabral, Barahona, la que informó está abandonada.
Pérez Méndez dijo que a partir de enero comenzará la lucha por la reposición de los maestros bloqueados y porque el magisterio cuente con un sindicato que responda por los intereses de los docentes.
“La Asociación Dominicana de Profesores no responde al interés del magisterio a nivel nacional”, manifestó Pérez Méndez.
El dirigente magisterial, quien habló durante un encuentro por las festividades navideñas, dijo que el sistema educativo ha vivido en una eterna mentira y que no ha cambiado nada con la “revolución educativa”.