Vladimir espera tranquilo resultados votaciones
El expelotero de Grandes Ligas y posible salón de la fama, Vladimir Guerrero, llevó alegría a cientos de personas este fin de semana previo al día de Noche Buena en su natal pueblo de Nizao, con motivo a las festividades navideñas.
Guerrero, quien desde hace 16 años realiza este tipo de actividad en su comunidad, entregó unas mil fundas de comida acompañado de su madre Altagracia Alvino y algunos de sus hermanos, entre ellos Eliezel, padre de Gabriel, jugador de las Estrellas Orientales. La donación se enmarca dentro del programa de responsabilidad social del pelotero con sus compueblanos, según comunicó Virgilio Rojo, representante de Vladimir.
“Me siento muy contento de hacer este tipo de actividades junto a mi familia. Es bueno darle a la gente que lo necesita y más en una fecha como estas, espero el año que viene entregar una mayor cantidad de fundas, para que la gente tenga su cena del 24 segura”, acotó Vladimir. De su lado, la señora Altagracia dijo que: “Siempre me ha gustado estar involucrada en la entrega de comida, Miqueas (Vladimir), también entrega juguetes el Día de Reyes, pero me gusta que además de los niños, los ancianos y viudas, puedan cenar tranquilos”.
Desde las 8 de la mañana del pasado 23 de diciembre cientos de personas, entre ellos niños, jóvenes y ancianos estuvieron ordenados en las afueras de la casa de la madre de Vladimir, con el fin de recibir los alimentos para la cena de Noche Buena.
Sobre Salón de la Fama
De las 453 boletas de los escritores del béisbol de los Estados Unidos, autorizados a votar para la elección al Salón de la Fama de Cooperstown, han sido dadas a conocer 98 la mañana del pasado 24 de diciembre y Vladimir registra un aumento a 94.1% de votos para ser llevado al nicho de los inmortales que serán exaltados a mediado de año.
“No estoy atento a las votaciones, estoy aprovechando el tiempo de la navidad junto a mi familia, pero mi publicista Virgilio Rojo se mantiene pasándome los resultados de cómo van las boletas”, dijo Guerrero, con mirada cauto a los periodistas.
“Espero tranquilo y en paz con Dios. Voy a respetar la decisión de Dios, a él le dejaré todo”, agregó el espigado exjugadores de Grandes Ligas, mientras supervisaba la entrega de alimentos que como cada año lleva a su natal Don Gregorio, junto a su madre y hermanos.