UN MOMENTO Higüeyanos no residentes
Es interesante que después de largos años, con la aprobación del ayuntamiento de Higüey, de la alcaldía de Higüey, y también con la anuencia del obispado de Nuestra Señora de la Altagracia, haya un día dedicado a los higüeyanos no residentes, días después de la fiesta del 21 de enero.
El sábado siguiente a esta fiesta del 21 se tiene una celebración especialmente dedicada a los higüeyanos no residentes: se celebra la eucaristía y además se tiene el Festival de la Yuca, un festival que quiere recoger tradiciones higüeyanas. Allí mismo se les entregan pergaminos de reconocimiento a higüeyanos ilustres que hayan realizado obras de bien social fuera de Higüey.
¡Qué interesante es esta celebración! Los que van a ver sus orígenes, sus raíces --y sé que de Santiago hay grupos organizados para ello, como también de Santo Domingo--, pueden en efecto buscar sus raíces, y constatar cómo esas raíces han trascendido haciendo el bien en tantos otros lugares. Por eso este lazo entre las tradiciones altagracianas y lo que se está viviendo es mucho lo que nos dice.
Deseamos que esta fiesta de los higüeyanos no residentes --este sábado que sigue a la fiesta de la Altagracia-dé muchos frutos, y nos anime a todos a seguir adelante y, enraizados en la Altagracia, a seguir haciendo el bien dondequiera que estemos.
Hasta mañana, si Dios, usted y yo lo queremos.