UN MERENGUERO de tres décadas y algo más
Los Premios Soberanos 2018 rendirán tributo en un segmento especial al carismático artista de Villa Altagracia, Sergio Vargas, quien celebra 35 años de carrera musical.
Habían transcurrido cinco años entre el debut profesional de Sergio Vargas, cuando grabó “Morena”, su primer merengue con El Equipo de Dioni Fernández, y su primera nominación en el año 1988 a Premio Casandra, como antes se le conocía a Premios Soberanos.
Todo eso porque El Negrito de Villa era cantante de otras dos orquestas antes de conformar su propia orquesta: El Equipo y Los Hijos del Rey.
El debut de Sergio fue un acontecimiento musical, gracias a voz, a su carisma, a sus orígenes como joven nacido y criado en un barrio de Villa Altagracia y a su talento. El título de su primer álbum en solitario no podía ser otro: Ciclón.
El LP salió al mercado con el poderoso sello internacional CBS y gracias a la popularidad de canciones como “Bamboleo”, “Por ella”, “Perla negra” y “Marola”, el artista obtuvo en 1988 su primera nominación a los premios como Agrupación popular musical.
El artista inició en ese entonces su recorrido por la principal premiación artística de República Dominicana, creada en el 1984 por la Asociación de Cronistas de Arte (Acroarte), entidad que hoy organiza el evento junto a Cervecería Nacional Dominicana (CND).
Desde el 1988, antes de ganar su primera estatuilla, el intérprete de “La quiero a morir” es nominado también en el 1989 como Agrupación Musical Popular y como Concierto del año por “Sergio Vargas en otra dimensión”; en 1990 como Agrupación musical popular.
Con tres postulaciones en la edición de 1991, el artista participa en los renglones Agrupación popular en el extranjero, Agrupación musical popular y es con su Espectáculo del año «Sergio» que finalmente gana el preciado galardón.
A lo largo de sus 35 años de carrera desde que debutó con El Equipo en el 1983, El Negrito de Villa ha conseguido un total de 43 nominaciones a los premios.
En el 1991, quizás porque la mayoría de sus éxitos provenían de adaptaciones de canciones interpretadas por artistas y compositores extranjeros, consigue su primera nominación en la competitiva categoría merengue del año, con su canción “La novia”.
Los criterios que rigen los premios establecen que no son elegibles para merengue del año las canciones escritas por autores extranjeros.
En lo adelante, entre el 1992 y hasta el 1998, el carismático intérprete consigue una docena de nominaciones y segundo galardón, gracias a su hit “La ventanita”, que fue el merengue del año en el 1993.
En ese lapso, sería postulado, además, por: Especial de televisión por “Este es mi país” (1992), agrupación musical del año (1992), agrupación musical del año (1993), espectáculo del año por “Somos un pueblo que canta” (1993), orquesta del año en 1994 y 1995; concierto del año por “Historia de éxitos”, agrupación popular destacada en el extranjero (1997), cantante solista (1997), concierto del año por “Amigos” junto a Míriam Cruz (1997), orquesta del año (1997) y finalmente merengue del año por “Mala memoria” en el 1998.
Iniciaría la década del 2000 con sus primeras nominaciones tras el éxito de sus presentaciones fuera de República Dominicana, como agrupación destacada en el extranjero, cantante solista, espectáculo del año por “Había una vez un merengue” y como merengue del año por la canción con ese mismo título. Cuatro nominaciones importantes, de las cuales no ganó en ninguna de ellas.
Al año siguiente, Sergio popularizaría una canción que lo volvió a colocar en los primeros lugares, y la que marcó una nueva época de su carrera: «Dile», nominada como Merengue del año en el 2001 (que no ganó).
Transcurriría exactamente una década entre su segundo galardón en el 1993 y el tercero, que obtuvo como orquesta del año en el 2003. En los diez años del 2000 hasta el 2010, Sergio Vargas sumaría veintiuna nominaciones a los prestigiosos premios dominicanos.
Ganó como Orquesta del año en el 2003 y 2004 y en el 2005 obtiene su tercera –y última– estatuilla de manera consecutivo, por el concierto del año que ofreció junto a Milly Quezada en el Teatro Nacional.