La emocional es la violencia más común que sufren las mujeres
La proporción de mujeres que reportaron violencia física, emocional y sexual creció en los últimos 10 años de 28% a 35%, de acuerdo con un análisis realizado por el Centro de Estudios de Género del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (CEG-INTEC) a propósito de conmemorarse el 8 de marzo el Día Internacional de la Mujer.
El documento “Desigualdades entre mujeres y hombres en todos los ciclos de vida, evidencian exclusión social en la República Dominicana”, sostiene que la violencia emocional es la más frecuente de todas con 31% de las denuncias (aumentó 13%), seguida por la física (19%) y la sexual (10%).
El análisis fue presentado por la decana del Área de Ciencia Sociales y Humanidades, Elsa Alcántara; Lourdes Contreras, directora del CEG, y Desireé del Rosario, coordinadora académica.
Según el estudio, la incidencia de la violencia es mayor en las mujeres separadas, viudas o divorciadas (48%), las que tienen cinco o más hijos (50%), las que tienen educación primaria entre 5-8 años (42%), las del quintil más pobre (40%), las adolescentes y jóvenes (40%) y de zona urbana (36%). El documento señala que la tasa de participación de las mujeres en el mercado laboral ha aumentado en las últimas décadas, pero aún registra desigualdades respecto a los hombres.
cifras de feminicidios, como dimensión más visibilizada de la violencia se mantienen altas, calculándose 177 en promedio por año, en el período 20052017.
A noviembre del 2017 se tenían 170 feminicidios y homicidios de mujeres, de los cuales se destacan 83 íntimos, según el análisis.
Estos niveles colocan a la República Dominicana en la quinta posición a nivel de Latinoamérica y Caribe en 2016, superada solo por Honduras (466), El Salvador (371), Argentina (254) y Guatemala (211).
El CEG plantea que más allá de la violencia de género, las mujeres son víctimas de las desigualdades desde su nacimiento hasta la vejez, por lo que se requiere de esfuerzos más efectivos y enérgicos para avanzar hacia la igualdad, sobre todo en la defensa de los derechos de las mujeres, tales como la paridad en la participación política, el derecho a una vida libre de violencia, y a la salud sexual y reproductiva, la educación integral en sexualidad, así como el derecho al empleo en igualdad de condiciones y a la no discriminación en materia salarial.
Desnutrición y educación
Todavía existen en el país más de un millón de personas subalimentadas, de ese grupo hay 65,000 niñas y niños que sufren de desnutrición crónica por una precaria ingesta de micronutrientes, según el análisis.
Las cifras indican que la prevalencia de la desnutrición infantil crónica es particularmente elevada en los niños y las niñas de los hogares más pobres, y de aquellos de madres sin educación y con educación hasta el nivel primario.