Los Premios Soberano
Me divertí, disfruté y pude apreciar hasta el final el desarrollo de estos premios, luego de que llegara en el Metro, con parada en la Estación Casandra Damirón, junto a Orlando Jerez. No sé si fue porque cuando me invitaban en los últimos años mi boleta como parte de Acroarte era para “balcón”, donde no hay tanta visibilidad para apreciar y criticar y en esta ocasión estuve en Platea X (sería por mi nombre) en la que me sentí más cómoda. Aunque algunas personas han criticado todo, por su “especialismo”, yo sin ser especialista, solo que tengo visión colectiva o panorámica, además de chequear algunos detalles, me gustó la producción, la escenografía, las coreografías, el 90% de la escogencia de los nominados. ¿Que la Alfombra Roja estaba floja? ¡Cierto!, pero lo compensó lo que sucedió adentro del Teatro Nacional con la Gala. Nashla Bogaert hizo un papel excelente, cuánto desenvolvimiento, me encantó. De Roberto Ángel, sinceramente, no apostaba a él, sin embargo me sorprendió, se empoderó de su rol y lo hizo bien. A los talentos jóvenes, aunque tengan experiencia en la televisión, hay que darles oportunidades para ver qué pasa, porque no es lo mismo hacer un programa de televisión que enfrentarse a un público observador, crítico, que solo espera que “meta la pata”, por lo que no se puede hacer conjeturas sin saber qué pasará. Felicito a los presentadores principales. Por primera vez no me aburro en la parte final, me mantuve activa con las ocurrencias. ¿Lo que me emocionó? El espectáculo de luces, la escenografía de “La pimienta es la que pica”; el mensaje de David Ortiz, la llamada de la madre del Pachá para anunciar el ganador de un renglón y otras cosas como el Soberano a Sergio Vargas, haberle dado la oportunidad a Alberto Zayas como productor general de esta versión de los premios Soberano. Cuánto talento en este joven, cuánta capacidad creativa, cuánta humildad y a Guillermo Cordero por su trabajo como coreógrafo y el equipo responsable de la producción. La directiva de Acroarte, encabezada por Emelyn Baldera, merece mis felicitaciones, porque esta gala fue magnífica, con créditos especiales a Telemicro y a la Cervecería Nacional Dominicana, por su apoyo. De ahí nos trasladamos al hotel Jaragua para disfrutar del After Viva hasta las 3:30 de la mañana.