La OMC observa atenta el aumento de aranceles EE.UU.
Los países afectados parecen más inclinados a buscar una solución negociada, con excepción de China.
La Organización Mundial del Comercio (OMC) observa con gran atención y cautela las primeras consecuencias de la decisión de Estados Unidos de restringir el comercio del acero y el aluminio mediante una alza de aranceles, una medida que parece más y más claramente dirigida contra China.
La subida del 25% de los aranceles para el acero y del 10% para el aluminio entró en vigor el pasado día 23, al mismo tiempo que una exención temporal para algunos de los mayores exportadores de ambas materias, esenciales para la industria moderna en múltiples sectores.
Del aluminio y del acero dependen en gran parte la manufactura automovilística, de maquinarías, la construcción y el transporte, por mencionar sólo algunos sectores a los que la medida de la Administración del presidente Donald Trump afecta directamente.
La OMC se mantiene “expectante”, dijeron a Efe fuentes comerciales en Ginebra -donde esta organización tiene su sede- en tanto se aclare el rumbo que tomarán las cosas y, sobre todo, que algún país se decida eventualmente a denunciar la medida estadounidense ante su Órgano de Solución de Disputas.
El excomisario de Comercio de la UE y exdirector general de la OMC Pascal Lamy ha comentado la medida estadounidense como “propia de la Edad Media” y que “será pagada por los consumidores” para beneficio de una industria “que no es muy competitiva en EE.UU.”.
Por el momento, los países afectados parecen más inclinados a buscar una solución negociada, con excepción de China, que ha prometido represalias.
La segunda economía más importante del mundo ha sido en los años recientes el más importante suministrador de acero de EE.UU., al representar el 33.7% de esas importaciones.
En el caso del acero, el bloque comunitario no aparece como un gran vendedor a EE.UU., que después de China- se ha venido abasteciendo principalmente de México (11.9%), Canadá (10.3%) y Taiwán (7.1%).
En el caso del aluminio, Canadá es el país que más vende a EE.UU. (36.9%), seguido de China (16.4%), Rusia (7.3%), Emiratos Arabes Unidos (6%) y México (4.7%), según los datos más recientes del Centro de Comercio Internacional, una entidad cofundada por la OMC y la Conferencia de Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo (UNCTAD).