UN SALSERO
DE APERTURA URBANA
Víctor Manuelle fue uno de los primeros artistas tropicales o del pop en realizar colaboraciones musicales con los primeros líderes emergentes del movimiento urbano. Esos intercambios con gente joven y su adaptación a las tendencias de las nuevas generaciones fue una de las tantas claves para su permanencia durante 25 años en el gusto popular.
“Siempre he sido muy abierto para colaborar. Mi carrera ha sido totalmente de evolución porque he entendido que el público busca nuevas tendencias que a los jóvenes les gusta”, comentó ayer durante un encuentro de prensa en Cap Cana, donde ofreció detalles de su concierto, el próximo 28 de abril en el complejo turístico Los Establos, de esta zona.
Sin embargo, el intérprete de “Tengo ganas” aclaró que su ritmo siempre será la salsa. “Nadie me acusa de invadir otro género porque yo he puesto a todos estos urbanos a cantar salsa conmigo... tal es el caso de Bad Bunny y Farruko”.
En 2003 él colaboró con Hector y Tito, “cuando la gente no sabía que el género urbano iba a llegar al momento donde se encuentra ahora. Fui muy abierto en eso”.
Los cambios
En estos 25 años ha vivido numerosos cambios. “Mi primera producción fue en vinil, en pasta, tengo varios cassettes, he vivido la evolución de la industria desde el formato análogo hasta cómo han ido creciendo los géneros”.
Víctor celebrará en Cap Cana sus 25 años de carrera, durante un concierto en el que presentará las canciones de su nuevo álbum “25/7”, al mismo tiempo que hará un recorrido musical desde sus inicios.
Para la celebración se hará acompañar de los reguetoneros puertorriqueños Jowel & Randy, y Tito El Bambino, del cantautor argentino Noel Schajris y del merenguero dominicano Gabriel.
El puertorriqueño dijo sentirse realizado con todo lo que ha logrado en estos años. “Han sido 25 años de muchos sacrificios, donde mi público se ha mantenido apoyándome, es lo más satisfactorio. Mantenerse vigente es el reto más grande de todo artista y le doy gracias a Dios porque me he mantenido vigente. Yo pienso que no me falta nada. Dios me ha dado más de lo que soñé hace 25 años”, expresó.