SANO Y ESENCIAL
La doctora consultada por Listín Diario señala que en líneas generales cuando una persona es físicamente activa, lo aconsejable es que su alimentación contenga un 15% de proteínas, menos del 30% de grasa sin olvidar que los alimentos contienen y no toda proviene de la culinaria, y 60% de los hidratos de carbono, como los cereales, los azúcares, las frutas y vegetables y las legumbres.
Según ella, las frutas aportan vitaminas antioxidantes, minerales y fibras, estas últimas permiten un mejor desempeño del tránsito intestinal y bloquea la absorción de grasas. Especialmente, recomienda el consumo de la piña, el zapote y la naranja. Además, los vegetales también son ricos en aportar vitaminas, minerales y fibras.
Con respecto a las proteínas, Ramírez Salazar las valora porque “cumplen funciones defensivas, inmunológicas, estructurales, de crecimiento, entre muchas otras importantes tareas”. Y por si fuera poco, luego de ejercitarse estas reponen las energías que fueron gastadas, aunque antes de hacer la rutina es recomendable consumir carbohidratos, como la miel, la mermelada, los dulces o los pasteles.
¿Y los granos? Ramírez Salazar expresa: “Son los principales en aportar los carbohidratos como fuente de energía primaria, pero a la vez tiene un alto contenido de proteínas, como es el caso de las habichuelas, los garbanzos, las lentejas y la soya”.