Cooperación española lleva 30 años de éxitos
(+) Desde el principio, se buscó igualmente apoyar a los dominicanos en sus esfuerzos para mejorar servicios sociales básicos, como Educación o Salud.
Los próximos 21 y 22 de mayo, Su Majestad la Reina de España Doña Letizia visitará la República Dominicana en su tercer viaje de cooperación desde el inicio de su reinado. Es una prueba al más alto nivel, del profundo afecto y compromiso de España con el pueblo Dominicano, nuestro pueblo hermano.
Este año tiene un significado especial para la Cooperación Española, porque se cumplen tres décadas de su presencia en la República Dominicana. En efecto, el 30 de noviembre de 1988 se reunió, por primera vez, la Comisión Mixta HispanoDominicana de Cooperación Técnica, encuentro en el que se define y planifica conjuntamente el destino de los fondos de la cooperación provenientes de la solidaridad de los españoles con el pueblo dominicano.
En los treinta años transcurridos desde entonces, la Comisión Mixta se ha reunido ya en ocho ocasiones, renovando periódicamente el compromiso adquirido por España. Este 30 aniversario constituye una ocasión propicia para hacer balance de todo lo conseguido hasta la fecha y avanzar con mayor firmeza si cabe en el futuro.
Un recorrido que quiero comenzar con la cooperación cultural, que descansa en los fuertes lazos históricos que unen a españoles y dominicanos y en nuestra lengua compartida, que tanto facilita nuestras relaciones. Un gran hito en este ámbito fue la conmemoración del Quinto Centenario en 1992, que trajo un amplio programa de cooperación cultural y científica, con el respaldo a iniciativas de recuperación arqueológica en los parques de La Isabela y de la Vega Vieja.
Durante estos años se han llevado a cabo numerosos proyectos de gran relevancia, como el apoyo a la preservación del patrimonio en la Biblioteca Nacional, el Archivo General de la Nación y el Archivo de Santiago de los Caballeros, o la restauración de los Tapices del Alcázar de Colón.
Además, en 1991 abrió sus puertas el Centro Cultural de España en Santo Domingo que, andado el tiempo, se ha convertido en un referente para la escena cultural en el país.
Desde el principio, se buscó igualmente apoyar a los dominicanos en sus esfuerzos para mejorar servicios sociales básicos, como la Educación o la Salud.
Numerosos proyectos han impulsado la mejora del sistema educativo, con un acento en la formación del profesorado y sin olvidar los programas de alfabetización de adultos.
El programa de medicamentos esenciales o las acciones de apoyo a la vigilancia epidemiológica constituyeron algunas de las actuaciones iniciales en el ámbito de Salud que, a partir del año 2000, se renovaron con el respaldo al Nuevo Modelo de Atención Primaria.
Conscientes de que el desarrollo requiere de una institucionalidad sólida y con amplias capacidades, desde mediados de los 90 se estableció como línea prioritaria el apoyo a la modernización institucional, ejecutando proyectos con el Instituto Nacional de Administración Pública, la Oficina Nacional de Planificación, y en municipios de todo el país. Mención especial merece la implicación en la reforma y modernización del sector justicia, dirigida a fortalecer las capacidades del Poder Judicial, del Ministerio Público y la Policía Nacional, promoviendo la organización de carreras profesionales a las que se accede y progresa por méritos y de manera objetiva y planificada.
En el ámbito económico, ha tenido gran relevancia la creación del programa español de microcréditos, dedicado a promover la finan- ciación de micro y pequeñas empresas y apoyar la reconstrucción del tejido económico, seriamente dañado tras el paso del Huracán George en 1998. El desarrollo del sector turístico ha motivado proyectos como el respaldo a la creación del Plan de Promoción Turística y del Instituto Regional de Formación Turística.
Otra de las líneas que ha marcado estos 30 años de trabajo ha sido la conservación del medio ambiente y la puesta en valor de la riqueza natural y de la biodiversidad del país. Entre los muchos proyectos ejecutados, quiero mencionar el apoyo al uso y gestión de los recursos naturales en la Región de los Haitises, el estudio de la contaminación de los principales ríos del país o la promoción de la sostenibilidad medioambiental a través del programa Araucaria.
No quiero concluir este breve recorrido, sin mencionar dos iniciativas de gran valor. En primer lugar, el Fondo de Cooperación de Agua y Saneamiento, para mejorar el acceso al agua de la población y el saneamiento rural, con una aportación total de 1.500 millones de euros en América Latina y el Caribe, del que también se ha beneficiado República Dominicana, sobre todo en el ámbito rural.
Y, también, la introducción de la perspectiva de género en toda nuestra cooperación.
Somos conscientes de que las problemáticas de desarrollo son más agudas y difíciles para las mujeres y debemos trabajar en la igualdad de oportunidades, y en la desaparición de cualquier forma de violencia contra ellas, sea ésta doméstica o relacionada con la trata y tráfico de personas. El apoyo al fortalecimiento de la Secretaría de Estado de la Mujer, precursora del actual Ministerio, es uno de los proyectos de los que nos sentimos orgullosos.
Toda esta labor sólo ha sido posible gracias al trabajo de un sinfín de instituciones dominicanas y españolas, de diferentes niveles de la administración pública y del sector privado. Merecen una mención especial las ONGDs y los cientos, posiblemente miles de españoles y dominicanos que han trabajado juntos para mejorar las condiciones de vida y promover el desarrollo social, económico y medioambiental de este querido país.
Tras la reciente aprobación del V Plan Director de la Cooperación Española, que mantiene a la República Dominicana como uno de los países de asociación preferente, en 2018 iniciaremos la negociación del nuevo Marco de Asociación País, para definir aquellos ámbitos en los cuales España pueda aportar más valor.
Seguimos trabajando juntos, unidos por el deseo de mejorar la vida de quienes son, como todos nosotros, iberoamericanos bajo el mismo cielo.
El autor es secretario de Estado de Cooperación Internacional y para Iberoamérica y el Caribe. Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación, Gobierno de España.