Listin Diario

Por las madres

- Tomás aquino Méndez Para comunicars­e con el autor tomas.mendez@lisitndiar­io.com

Otra fecha. Otro día. Otra celebració­n. Soy de los que siempre ha dicho y sostenido que no hay un Día de las Madres porque, todos son de ellas. Para regalarle, para llevarle flores, para darle cariño, para reciprocar todo el amor que nos han entregado desde que nos conciben en sus vientres.

Esta semana, víspera del Día consagrado a ellas, el último domingo de mayo, me llamó la atención el reclamo de muchas madres.

Posiblemen­te consciente­s de que ellas tienen ganado su cariño y su lugar privilegia­do en la sociedad, siguen pensando siempre en los demás. Por eso Ailín, conductora de patanas, en la cual lleva mercancías por todo el país, llama a la mujer a no soportar mal trato de su pareja.

Tuvo su hija a los 25 años y sin mirar para atrás, se separó de su compañero porque éste no entendió que ella era una compañera, no una esclava, y quiso abusar de ella.

“Mejor sola que mal acompañada”, se dijo, y hoy vive feliz con su hija adolescent­e. De su lado Denisse, dedicada a CONCHAR en rutas de Santo Domingo Norte, aunque vive de lo que le deja este trabajo, “no deja a nadie a pie aunque no tenga el dinero completo”, porque así son ellas, las madres, de corazón sencillo y amoroso.

Cito estas dos, pero Ailern y Eleuteria también se ex- presaron en la misma dirección. Siempre pensando en los demás y poniendo delante el trabajo y el compromiso con el hogar y los hijos. El Listín Diario dedicó cuatro entregas en la víspera de este día especial a mujeres dedicadas al difícil oficio de conducir vehículos de servicio público y patanas en empresas. Todas resaltaban la importanci­a de lo que hacen y la satisfacci­ón de ganarse el sustento diario con EL SUDOR DE SU FRENTE.

Como ellas, son cientos las madres-mujeres o mujeresmad­res que día a día salen a las calles a realizar una labor productiva. Lo hacen con amor, con cariño, con dedicación. Lo hacen para llevar no solo dinero al hogar, sino satisfacer las exigencias y necesidade­s de los hijos.

A veces también de otros parientes que viven con ellas o de ellas. Es cierto que se ha dicho mucho sobre la necesidad de CERO violencia contra la mujer. Es verdad que se ha escrito hasta la saciedad del tema. También han sido muchos los funcionari­os del área judicial y desde el Gobierno que han pregonado cantidad de programas preventivo­s.

A pesar de todo, siguen los feminicidi­os y los maltratos. Mis Expresione­s también quieren decir NO MÁS FEMINICIDI­OS, por las madres, por las mujeres, por la sociedad, por la familia.

Este no debe ser un día, tienen que ser TODOS LOS DÍAS, en los que tenemos el compromiso de quererlas, amarlas, respaldarl­as y entregarno­s, incondicio­nalmente, a ese maravillos­o y adorable ser, QUE NOS DA LA VIDA.

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