Repudian separación familias
Miles de personas salieron ayer a las calles en varias ciudades de Estados Unidos para protestar contra el creciente número de niños y padres indocumentados que son separados en la frontera con México tras la entrada en vigor de la política de “tolerancia cero” contra el cruce ilegal.
El fiscal general del país, Jeff Sessions, “ha creado una política para separar a nuestros hijos de sus padres, algo inmoral, criminal y que nosotros no vamos a aceptar”, exclamó el director de la organización Casa Maryland, Gustavo Torres, frente a las 300 personas congregadas frente al Departamento de Justicia en Washington.
La Fiscalía anunció el pasado 6 de mayo que presentará cargos penales contra todos los extranjeros que sean sorprendidos cruzando la frontera irregularmente, un esfuerzo que pretende frenar la inmigración clandestina.
Esta medida, conocida como “tolerancia cero”, envía a los padres a custodia penal y a los niños a refugios financiados con fondos federales supervisados por el Departamento de Salud y Servicios Humanos.
Para Jessica Morales, de la organización We Belong Together, que aboga por los derechos de las familias inmigrantes, la Administración del presidente Donald Trump debe terminar con esta política “inmediatamente”.
“Cada día están separando a niños de sus padres. Trump debe terminar inmediatamente con esta política, no podemos esperar ni un día más”, agregó.
Hasta ahora, los únicos datos hechos públicos muestran que entre el 6 y el 19 de mayo un total de “658 niños y 638 adultos” fueron separados en la frontera sur del país, tal como explicó la semana pasada el subdirector del programa de operaciones de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), Richard Hudson. A pesar de que la manifestación en Washington fue la central, a lo largo del día se vivieron numerosas protestas en una treintena de ciudades del país, incluyendo Los Ángeles, Nueva York y Chicago, y una en Barcelona (España), según los organizadores.
Los grupos que protestaron en la capital decidieron llevar a la manifestación a decenas de niños y menores de edad “para reflejar las diferencias en las vidas de unos y otros por el mero hecho de dónde han nacido”, señaló un portavoz de la misma.