Pruebas para generar el “pequeño sol”
Italia acoge desde hoy un experimento con el que se empezará a estudiar cómo hacer funcionar el reactor nuclear de ITER, una apuesta internacional por la fusión, la energía de las estrellas, para acabar con el combustible fósil en el futuro.
El experimento SPIDER fue inaugurado en la Instalación de Pruebas de Rayos Neutros de Padua (norte), del Consorcio RFX, y consiste en un rayo que ayudará a los técnicos a desarrollar la fuente de iones que calentará el Reactor Termonuclear Experimental Internacional (ITER) que se construye en Cadarache, en la Provenza francesa (sur).
ITER será la mayor instalación experimental del mundo dedicada a la fusión nuclear y tiene por objetivo demostrar la viabilidad científica y tecnológica de dicha técnica, con fondos de la Unión Europea (UE), China, Japón, India, Corea del Sur, Rusia y Estados Unidos.
Para que produzca energía fusionando átomos de hidrógeno debe contar primero con una serie de potentes dispositivos que calienten su plasma, su combustible, hasta los 150 millones de grados centígrados y, para eso, SPIDER es un importante primer paso.
El experimento es el más poderoso rayo de iones negativos del mundo y servirá para investigar la producción de iones negativos de hidrógeno y de su isótopo deuterio que en un futuro calentarán el núcleo de ITER hasta hacerlo funcionar.
Inauguró el experimento, junto a otras autoridades, el director general de ITER, Bernard Bigot, quien celebró que aunque “aún hay muchos retos para producir esta energía en la tierra de una forma sostenible y económica”, cada día se está “más cerca”.
Uno de “los grandes retos” del proyecto será crear la “increíble” temperatura que se requiere, “diez veces más caliente que el núcleo del sol”, explicó. Y “Spider es una bella criatura (...) que ayudará a desarrollar esta nueva tecnología y proporcionar el extraordinario potencial que se necesita, el modo de generar y mantener esta temperatura”, indicó Bigot, que aplaudió este “ejemplo” de colaboración internacional.
Este experimento será “esencial en la fabricación de la fuente real en ITER que alimentará los inyectores que calentarán el plasma”, indicó a Efe Tullio Bonicelli, responsable de “Fusion for Energy”, organización con sede en Barcelona que gestiona los fondos de la Unión Europea para este gigantesco proyecto. El objetivo es emular las reacciones y fusiones que tienen lugar en el sol y los inyectores que se desarrollarán para ITER, esenciales para lograr esa elevadísima temperatura, actuarán como “una cerilla que enciende un fuego enorme”, explicó.