“La Isla no está aislada”
A nivel mundial el 70% de las áreas de recursos humanos ya están considerando el uso de los datos para tomar decisiones y optimizar la gestión del talento.
En República Dominicana bservamos un rezago significativo con una mayoría de 70% que todavía no percibe cómo convertir el análisis de datos en valor para las áreas de talento humano.
Este es uno de los hallazgos del estudio global anual de Tendencias de Capital Humano que publicó Deloitte, este año por primera vez con una fuerte representatividad de las empresas dominicanas.
Por otro lado, observamos que el 93% de las empresas entrevistadas en el país validan el hecho de que el trabajo por varios canales (redes sociales, trabajo colaborativo, mensajería instantánea) mejora la productividad, superando el promedio mundial de 70%. Sin embargo, tan sólo un 9% de estas mismas organizaciones permite la modalidad de teletrabajo para sus colaboradores.
Esta realidad debe sonar como un llamado de atención. No podemos escondernos detrás de la tecnología, ésta lleva ya varios años de satisfacer las necesidades de los negocios en el mundo, para inyectar flexibilidad y eficiencia en las organizaciones. Las barreras más comunes son la falta de sentido de urgencia para llevar estos cambios en la empresa y la dificultad de modificar una cultura laboral establecida, la cual a pesar de su rigidez y verticalidad, ha llevado la compañía a ser lo que es hoy. Es precisamente la diferencia entre estas brechas que la explica como numerosas industrias se van visto revolucionadas por la llegada imprevista de actores disruptivos, es decir que actúan muy rápidamente con modelos de negocios nuevos: comercio, turismo, banca, seguros, telecomunicaciones, gobierno… ningún sector se escapa de esta ola impulsada en todo el orbe por el consumidor conectado.
Es fácil despertar un sentimiento de urgencia. Lo es mucho menos adaptar una organización a una cultura de cambio permanente. Toma tiempo preparar a la fuerza laboral a trabajar por proyectos, definidos para satisfacer mejor los clientes y que progresan según los resultados medidos gracias al análisis de datos.
El liderazgo y la anticipación son necesarios ejes de éxito en la 4a revolución industrial. Gilles Maury es director de Consultoría de Deloitte República Dominicana