¿Se trancó el juego? ¿Dónde está la llave?
Los expertos prefieren “frente a” o “contra” en lugar de “versus” que significan lo mismo. En México se registró una confrontación electoral sin precedentes en ese país.
De hecho, los politiqueros oxidados hicieron coro contra el emergente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), llamado despectivamente “lopito” por un exponente de la especie en extinción del esquema político en la tierra de Benito Juárez.
De ahora en adelante, los rancios mandos de la partidocracia derrotada han de encender su artillería frente a López Obrador, o sea, contra su presidencia en México.
El nuevo gobierno versus los gobernantes salientes escenifican el presagio de una tensión anunciada.
Aquí también estamos ante un futuro incierto cuyos protagonistas se alistan para lo que viene.
El ministerio público versus los jueces defendidos por la magistrada Miriam Germán, escenifican un primer choque público.
Con todo respeto y admiración por la juez, el colectivo que defiende no vale la pena, aunque el blanco de su ataque resulte certero por encarnar otro engaño aleve en el caso Odebrecht.
Se puede afirmar que el pueblo dominicano es un gran ausente en el actual pulso de ciertos sectores contra otros de la politiquería dominicana.
Las malas artes caracterizan lo que hacen unos frente a la mayoría de sus contrincantes.
La segunda parte de la novela pautada a varias entregas, no despierta esperanzas en la ciudadanía, porque se trata de aves del mismo corral.
El espectáculo ya reinició. Pero lo que puede esperarse es una puja prolongada, con todo tipo de incidentes, zancadillas y protagonismo mediático.
El juicio ocupará grandes titulares y será objeto de comentarios a diestra y siniestra, en lo que debió ser un excelente ejemplo del “buen derecho uno y dos”. Pero es un desbarre de artimañas antológicas.
Los miembros del Comité Central morado que defienden a los encartados, equivalen a lo mismo que los del Comité Político ya descartados de la lista.
Sin embargo, siguen las preguntas: ¿Se trancó el juego? ¿Dónde está la llave?