Museo a la última bruja cumple un año
(+) Inaugurado en agosto de 2017, y situado en la ciudad helvética de Glarus (noreste), el museo celebra estos días su primer aniversario y atrae cada vez a más turistas.
El museo de Anna Göldi, que explica la historia de la última mujer condenada por brujería en Europa, ha cumplido un año con un éxito creciente de público interesado en la vida de esta mujer, víctima de la discriminación.
El creador del museo, el periodista Walter Hauser, explicó a Efe que no está muy sorprendido por el buen resultado ya que está convencido de que la historia de Göldi acabará conociéndose en todo el mundo, porque “Anna es un símbolo contra la discriminación social y de la mujer”.
Inaugurado en agosto de 2017, y situado en la ciudad helvética de Glarus (noreste), el museo celebra estos días su primer aniversario y atrae cada vez a más turistas.
“Solo en el pasado mes de junio nos han visitado más de 50 grupos y cada día recibimos llamadas para concertar visitas guiadas”, contó. Por su parte la encargada del museo, Maggie Wandfluh, dijo: “Además, este año, gracias a la generosa donación de una veci- Anna Göldi dejó así de ser la última mujer condenada por brujería en Europa, “para convertirse en la primera ‘bruja’ del mundo exonerada por votación democrática”, matiza Hauser. El periodista creó también na de Glarus para la instalación de calefacción, vamos a poder abrir también en invierno”, agregó.
La vida de Göldi, dos siglos después de su muerte, sigue causando fascinación, y esa fue la razón que llevó a Hauser a abrir un museo para explicar su vida.
Hauser conoció la historia de Göldi hace 15 años y desde entonces se dedicó a investigar su caso, lograr su exoneración y crear el museo en su honor.
Göldi nació en 1734 en una familia humilde y desde muy joven comenzó a trabajar como sirvienta en diversas casas, sin mucha fortuna en ninguna de ellas. En 1780 entró al servicio de la familia del médico y juez Johann Jakob Tschudi, parte de la alta sociedad de Glarus.