Un gran día para RD
Siempre nuestras delegaciones en eventos internacionales oficiales, del ciclo olímpico, tienen un día fabuloso y ojalá se repita el de ayer. En lo que va de los XXIII Juegos Centroamericanos y del Caribe en Barranquilla, una hermosa ciudad que tuve el placer de visitar (tierra del Fidel Basa, el campeón pescador) y donde se celebró en una ocasión el Torneo Julio Gerlein Comelín, en honor al primer colombiano miembro del COI, un homenaje póstumo que le hacía la prensa… Bueno, allí y ayer los chicos dominicanos obligaron a sonar el Himno Nacional en cinco ocasiones; dos veces la potente pesista Grismery Santana; la gimnasta Yamilet Peña, por fin se estrena en el evento y que bueno que fuera con el oro; y los taekwondoistas Katherine Rodríguez y Moisés Hernández repitieron lo que ésta disciplina, al igual que las pesas, nos han acostumbrado en las últimas dos décadas. Los dominicanos estamos diseñados para ser receptores de malas noticias a diario, incluso, si no es un crimen, una violación, un desfalco, soborno, inflación y hasta un ciclón, si no es negativo, para este pueblo no es noticia; pero brindemos por este día de cinco “oros” en Barranquilla, como incorrectamente se está escribiendo hasta por agencias internacionales, celebre por esos días irrepetibles, por esas conquistas tan difíciles para nosotros.
UN POCO DE HISTORIA: Barranquilla es muy especial para el pueblo dominicano, ahí fue nuestra génesis en el deporte internacional organizado, como nación, fue en 1946 cuando debutamos en la (V) quinta versión de esos mismos juegos: ganó oro el béisbol, el voleibol femenino; el boxeo fue el gran rey dominicano: con cinco atletas ganó tres oro, una plata y un bronce; ¡todos fueron medallistas!. ¿Verdad? ¿Cómo terminarán esas tres disciplinas primarias en esta versión?
CONSEJO: Brinden rápido y mucho, aunque sea mabí, porque después de los días grandiosos, también, por experiencia, llegan escasas plata y una trulla, pero una lluvia de bronce que se extiende y oxida en lo adelante hasta el último día. De hecho, ayer también entraron tres bronce al medallero local. No soy joyero, no sé de oro ni plata, pero pronóstico de 40 a 50 chatas de bronce al regreso.
¿PACQUIAO-MAYWEATHER II?: A muchos no nos gusta la idea, pero es muy posible que Manny Pacquiao y Floyd Mayweather Jr. estén hablando en un patio, mientras comen patos asados o carne de perro ahumada, con las manos, como disfrutan los filipinos. Ellos dos, decepcionaron al mundo protagonizando el 5 de febrero de 2015 un combate que no gustó y que recaudó más dinero que todas las grandes “Peleas del siglo” juntas. Luego del regreso triunfal del filipino, con un aparatoso KO ante el argentino Lucas Matthysse en Malasia, no dude nadie de que se esté tejiendo esa madeja por debajo de la mesa, Pacquiao no irá al matadero ante Vasyl Lomachenko ni frente a Terence Crawford, tan fácil y por tan poco.
El gran show es ante Mayweather o por qué no, midiéndose a Conor McGregor. En lo que se arregla el muñeco, podría venir un plato de entrada, suave para PacMan, una papita como Amir Khan o Robert Guerrero.