SHOW MASIVO EL MIEDO AL DESAFÍO
Los estadios capitalinos parecen quedarles grandes a los artistas dominicanos fuera de Juan Luis Guerra o Romeo Santos. No hay quien se arriesgue a dar el batazo en los estadios Olímpico o Quisqueya. Del anfiteatro Altos de Chavón solo quedan los recuerdos de presentaciones de locales y con el impulso de Luis Medrano solo algunos se han animado a ir como protagonista único al anfiteatro de Puerto Plata.
En el siglo XX era más fácil para los artistas de moda en esos años convertirse en profetas en su tierra al protagonizar espectáculos multitudinarios, como se recuerdan los de Pochy Familia, Sergio Vargas, Johnny Ventura, Angela Carrasco, Los Rosario, Milly Quezada, Frank Reyes, Vickiana, Olga Lara...
En el siglo XXI el panorama cambió. Los atrevidos son menos. Y aunque tengan las posibilidades de llenar lugares masivos el miedo parece acorralarlos.
Es el caso del bachatero Anthony Santos, quien no termina de decidirse a cantar en el Estadio Olímpico (ya lo ha hecho antes, pero junto a otros artistas, no él de manera particular).
“Después del Festival Presidente llenaré solo el Estadio Olímpico”, llegó a decir “El Mayimbe” hace cuatro años. Y desde antes de eso se viene tratando el tema en los medios.
Merengueros, urbanos, salseros o solistas se abstienen de trazarse esos grandes desafíos de montar una plataforma para un espectáculo gigante, al menos que alguna empresa o productor asuma los costos de producción, que realmente son muy altos y no necesariamente son resarcidos con la venta de boletas. Artistas como Héctor Acosta (El Torito), que han querido enfrentar los gastos que conlleva un espectáculo masivo, han tenido que pensarlo dos veces.