El colmo de la ADP
Una semana antes de oficializarse el calendario del próximo año lectivo, escuchamos del principal directivo de la Asociación Dominicana de Profesores
(ADP) una advertencia que, sin exagerar el calificativo, tiene una alta dosis de temeraria.
Está, además de estrambótica, fue- ra de contexto e injustificada. Eduardo Hidalgo, presidente del sindicato que agrupa a los docentes, ha dicho que este año escolar estará matizado por acciones que desde su punto de vista buscan introducir mejoras al sistema educativo.
Las históricas jornadas desarrolladas por la ADP, desde su fundación hasta hoy, han recibido siempre el apoyo de amplios sectores, por considerar que se trata de un ámbito de alta prioridad para el desarrollo nacional.
Y es por esta razón que desde su primera gestión de Gobierno el presidente Danilo Medina puso en su agenda de prioridades al adecentamiento de la vida de miles de maestros, quienes con amor y dedicación forman a los futuros profesionales de República Dominicana.
Injusto sería cuestionar la voluntad del primer mandatario de impulsar el progreso de ese sector, no sólo con salarios dignos, sino viabilizando sus posibilidades de formación académica, para hacerlos más competitivos frente a la realidad que nos impone un mundo en constante transformación.
Estos cambios son de fácil comprobación. Basta con comparar el sueldo que percibía un maestro hasta finalizada la década de los 90’, con los ingresos que perciben actualmente. O echarle una mirada a los interesantes programas de capacitación a los que tienen acceso desde el profesor del centro de enseñanza más moderno, hasta el maestro rural que se traslada en mulo para llegar a la escuelita edificada entre montañas.
No pasa un mes sin que en cualquier parte del país el presidente Medina inaugure alguna escuela o liceo dotados de los equipos necesarios para operar acorde con las demandas de los nuevos tiempos.
Y qué decir del novedoso proyecto de tanda extendida, cuyos frutos son revalidados por testimonios de padres de familia agradecidos y contentos de poder contar con esta modalidad para sus hijos.
La lista de aspectos reformados es mucho más extensa. Y por ser la educación la piedra angular del programa de gobierno de Danilo Medina, ese ministerio trabaja sin descanso, con un excelente equipo técnico de alta calificación.
Entonces, escuchar nuevamente las amenazas del presidente de la ADP, de boicotear el año escolar como fallidamente lo hicieron el pasado, resulta una postura irresponsable, irritante y que pone en entredicho la esencia de ese gremio.
En nombre de los 2.7 millones de estudiantes que este año van a las aulas, pido al Gobierno que se mantenga vigilante de que nada ni nadie obstaculice el proceso de enseñanza-aprendizaje del cual depende el futuro de nuestra nación.