UN TÉ A LAS PIONERAS EN LA LUCHA CONTRA EL CÁNCER
(+) La Liga Dominicana Contra el Cáncer, fundada en 1942, tiene la misión de prevenir y diagnosticar el cáncer, y contribuir en la especialización de los profesionales del área.
Han pasado más de siete décadas desde que La Liga Dominicana Contra el Cáncer empezó a operar en el Instituto de Oncología Dr. Heriberto Pieter. Desde entonces, los miembros voluntarios de la entidad sin fines de lucro, han asumido con amor y compromiso la labor de ofrecer apoyo a los pacientes de cáncer y dar respuesta oportuna a todas sus necesidades.
Así lo explicó Julia Guerra de Oller, presidente de La Liga, al participar junto a parte de su equipo, como invitada en el tradicional encuentro La Hora del Té de Listín Diario.
“En todo este tiempo nos hemos preocupado por tener equipos de última generación para ofrecer un servicio de calidad y humano, a un precio justo. Yo puedo dar testimonio de que tanto el área de cirugía, estudios especializados u otro de los servicios que ofrece el hospital, están a la altura de cualquier centro médico fuera del país. Esto me llena de orgullo, porque en definitiva el lugar para los pacientes de cáncer que no pueden pagar es el Oncológico, pero también es la mejor opción para quienes cuentan con el respaldo de un seguro médico, porque estamos avalados por las nornas ISO de calidad”, sostuvo Guerra.
La Liga Dominicana contra el Cáncer cuenta con un equipo de 30 voluntarias que tienen la responsabilidad de orientar y apoyar a cada uno de los pacientes desde su llegada al centro.
“Cuando una persona llega con un diagnóstico, por lo general confirmamos, se le hacen todos los exámenes necesarios para aclarar cualquier duda y damos inicio a su tratamiento según el caso. Desde sus analíticas y medicamentos, hasta, en muchos casos hospedaje, alimentos o transporte, cuidando siempre la dignidad del paciente”, dijo Julia Guerra de Oller, quien tiene siete años como presidente de La Liga y 20 como miembro de la Asociación de Voluntarias.
“El rol de las voluntarias es brindar servicio al paciente, principalmente acompañamiento emocional y orientación. Manejamos la farmacia Milagro de la Caridad, lugar de venta de todo lo relativo a la quimioterapia, a un precio de costo y los beneficios contribuyen a la ayuda de los pacientes que no tienen recursos para sus tratamientos”, explicó Roxana Dargam Azar, presidente de la Rama Femenina de la Liga Dominicana contra el Cáncer.
“Uno de los grandes logros de la Liga Dominicana contra el Cáncer y el Instituto de Oncología Dr. Heriberto Pieter, ha sido ver como los pacientes y sus familiares se sienten satisfechos del servicio que reciben, y se convierten en voceros de las buenas noticias. Otro gran orgullo que compartimos, es que somos un hospital docente, la mayoría de los médicos oncólogos del país se han formado con nosotros y ésta es la mejor referencia”, explicó Bernadette Sánchez, encargada de Relaciones Publicas.
“Este trabajo voluntario es una gran enseñanza de vida. He aprendido a dar prioridad al ahora, a valorar el momento, a soltar un poco el alrededor para enfocarme en disfrutar cada segundo presente”, concluyó con evidente emoción Guerra de Oller.