SERÁ UNA RELACIÓN A PRUEBA DE LA HISTORIA
Hasta hoy llevo un poco más de un mes de llegada a este lindo país. Me gustaría aprovechar esta oportunidad para expresar mi más sincera gratitud al gobierno dominicano por las facilidades y el apoyo que me ha brindado. También quisiera dar las gracias a los amigos de todos los sectores del país y a los colegas del cuerpo diplomático, quienes han expresado su más calurosa bienvenida y aceptación al primer embajador de China en el país a través de cartas, visitas, flores, banquetes y artículos, lo que me hizo sentir mucho calor humano. Para mí, llegar a la República Dominicana es volver a la casa.
El 1 de mayo de este año, con los esfuerzos conjuntos de ambas partes, especialmente con el impulso del presidente Xi Jinping y el presidente Danilo Medina, China y República Dominicana establecimos las relaciones diplomáticas, hecho histórico que abrió una nueva página de los lazos entre los dos países. En los últimos cinco meses, las dos partes vienen realizándose frecuentes intercambios de visitas, y las diferentes instancias conectándose sin perder ningún minuto, de tal forma que el potencial de cooperación acumulado por largo tiempo ha surgido constantemente. La semana pasada, el Consejero de Estado y Ministro de Relaciones Exteriores de China, Sr. Wang Yi, realizó una exitosa visita oficial a la República Dominicana, y alcanzó un amplio consenso con el presidente Danilo Medina y el canciller Miguel Vargas sobre la hoja de ruta de la fase inicial de las relaciones chino-dominicanas, dejando un trazo clave en el cuadro que estamos pintando sobre la cooperación bilateral.
Después de llegar a este país, he tenido amplios contactos con diferentes sectores de la sociedad. Percibo un apoyo amplio y de corazón a nuestras nuevas relaciones. Un empresario me dijo que ese anuncio es como una linda música al oído. Una figura política me dijo que eso es su anhelo de toda la vida. Hace unos días, tuve una conversación con un amigo local, quien citó amistosamente a Napoleón y dijo: Una vez que el gigante chino se despierta, el mundo se templará. Respondí sin meditación: el mundo no se templará, porque China es un gigante pacífico y tranquilizador, tal como las ballenas jorobadas en la región de Samaná, que son de gran tamaño, pero mansos. La gente no tiene miedo, sino que se apresuran a acercarse a ellas.
Venimos por el diálogo y la comunicación. Desde la fundación de la República Popular China hace 69 años, el gobierno chino siempre ha seguido una política exterior de paz e independiente y firmemente ha salvaguardado la equidad y la justicia internacional. En la década de 1960, cuando el pueblo dominicano estaba en el proceso histórico de defender la soberanía y la dignidad, el presidente Mao emitió una declaración especial y el pueblo chino salió a las calles en apoyo a los dominicanos del otro lado del océano. Hoy día, a pesar de que China se ha convertido en la segunda economía y gran fabricador y exportador a nivel mundial, tratamos en pie de igualdad a otros países, sean grandes o pequeños, ricos o pobres.
El canciller Miguel Vargas dijo que los dominicanos han encontrado en China un amigo y un oído abierto a sus aspiraciones. Estamos totalmente de acuerdo con esta afirmación. China está dispuesta a ser amigo de República Dominicana y quiere tener intercambios de igualdad, diálogo sincero y ayuda mutua en aras de mejorar la confianza política y promover la paz y estabilidad internacional y regional.
Venimos por la apertura y cooperación. Este año marca el 40 aniversario de la reforma y apertura de China. En las últimas 4 décadas, la ocupación de China en la economía mundial ha subido del 1.8% al 16%, y durante muchos años consecutivos su contribución al crecimiento económico mundial ha excedido el 30%.
La reforma y apertura es la política de estado básica de China y también consiste en la fuerza motriz fundamental para el desarrollo del país. Estamos convencidos de que la cooperación es la única opción correcta, y la vía ganar-ganar conduce a un futuro mejor. Por lo tanto, seguiremos fortaleciendo y profundizando la reforma y ampliando la apertura. La “Iniciativa de la Franja y la Ruta” es una versión actualizada de esta política. Nació en China y pertenece al mundo. A un lustro de su lanzamiento, se ha convertido en una de las plataformas de cooperación internacional más popular. En el principio del año en curso, la Declaración Especial sobre la Iniciativa de la Franja y la Ruta aprobada en la II Reunión Ministerial del Foro ChinaCelac confirmó la bienvenida a la extención de dicha iniciativa a América Latina y el Caribe.
República Dominicana es la locomotora económica en América Central y el Caribe, con privilegiada ubicación y políticas económicas abiertas. Nuestros países son altamente complementarios en los campos de comercio, inversión, infraestructura, energía, turismo, agricultura, tecnología informática, etc. y tenemos un gran potencial para ser aprovechado. Estamos dispuestos a llevar a cabo diversas formas de cooperación con la parte dominicana en el marco de la “Iniciativa de la Franja y la Ruta”, lo que es favorable para República Dominicana en términos de creación de empleos y reducción de la pobreza.