Más promoción
Hernández Martich asegura que posiblemente uno de los problemas que explican el poco ingreso de estudiantes a la carrera es la falta de promoción, algo que considera es su responsabilidad de ahora en adelante (tiene apenas dos meses en el cargo) porque les interesa que la carrera se proyecte con la importancia que tiene para la sociedad dominicana.
Además de la poca promoción, el coordinador de Genética y Citología de la Escuela de Biología de la UASD apunta que hay muchos mitos y mucho desconocimiento sobre la función del biólogo.
“Hay gente que cree que los estudiantes se acercan a la carrea huyéndoles a las matemáticas”, agrega Yvonne Arias. “Bueno, si haces un bachillerato en Naturales y piensas que puedes hacer Biología y no te gustan las matemáticas, la física, la química, la biofísica o la bioquímica, entonces no te puedes inscribir en Biología”.
Hernández Martich también considera que en el bachillerato y en la misma universidad no hay mucha precisión en cuanto a la orientación que se les brinda a los estudiantes para que se decidan por esta profesión.
“La influencia que tienen los profesionales de la Biología en los estudiantes es muy grande. Es importante el acercamiento, que tengan la oportunidad de conversar, de ver lo que hacen”.
En ese sentido, expresa que como institución sí van a las escuelas, pero de manera muy tímida.
“Debemos tener un programa más formal y continuo de visitas a los colegios y escuelas públicas”.
¿Referentes nacionales que sirven de motivación?
Biólogos dominicanos ocupan o han ocupado en algún momento los cargos de ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales (hay tres viceministros de Medio Ambiente en la actualidad), asesor del Poder Ejecutivo en asuntos de medio ambiente, presidente de la Academia de Ciencias, directores del Museo de Historia Natural, del Jardín Botánico, el Acuario Nacional y el Zoológico Nacional.
También directora general de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de la UASD, director de Investigaciones Científicas y Tecnológicas del Mescyt, consejero de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) para la región de Norteamérica y el Caribe, dirección para las Américas del BirdLife Internacional e investigador del Departamento de Entomología en Smithsonian Institution.
Fundador del Departamento de Vida Silvestre de la Subsecretaría de Recursos Naturales en 1978, Martich opina que el incentivo económico ya no es factor para desdeñar la carrera.
“Si uno hace un análisis de los ingresos que tienen los biólogos en general, están por encima de muchos otros profesionales”.
Sin embargo, comenta que pese a su importancia sí existe el mito de que el profesional de alto nivel es el ingeniero, el médico o el economista, y que esto podría incidir en la selección de un biólogo para ocupar altos puestos. “Pero no tanto por la paga, sino por el reconocimiento social. Ese reconocimiento social a nivel de la profesión todavía no existe y es un problema de que no se entiende la función del biólogo, se desconoce incluso qué es un biólogo”.