Disciplina cooperativista desde el hogar y la escuela
El tema cooperativista traspasa la línea de lo meramente económico, y rasga muy de cerca el compromiso, lo cual suele servir de mucho a quienes tienen metas bien marcadas en sus vidas.
Para el año 2004, Melvin Padilla no imaginaba que asistir a reuniones cooperativistas cada semana lo llevarían a convertirse en la persona que es en la actualidad, un oficial de negocios que busca ayudar a las personas a cumplir sus metas, y dar a conocer los beneficios del cooperativismo.
“Como niño pasé por la directiva de niños, luego a la de jóvenes, seguí a la de adultos, hasta llegar a ser empleado. Esa fue la educación que la Cooperativa La Altagracia me dio”, expresó Padilla, quien siendo un adolescente de 14 años, tenía una cuenta de ahorros aperturada por su madre, y es en su cooperativa donde se enfoca verdaderamente en el tema junto a otros adolescentes.
Desde joven le fueron inculcados los valores humanos para convertirse en un líder cooperativista. Melvin confesó que la mejor manera de que los niños aprendan sobre el cooperativismo es divirtiéndose y siendo valorados.
Recorriendo el camino, encontró educadores que le instruyeron sobre el ahorro, la cultura, la salud, el medio ambiente, a indagar y transmitir lo aprendido, y siempre cooperar con la sociedad. Explicó que las reuniones estaban llenas de dinamismo y premiaciones; ese entorno y sistema le brindó la oportunidad de conocer más jóvenes como él, de asistir a campamentos, y obtener múltiples beneficios.
Un estilo de vida
Ariel Peña es un joven que llegó al cooperativismo por vía de una educadora del distrito Tamboril de la Cooperativa La Altagracia. Para Peña este sistema socioeconómico “es más bién como un estilo de vida, el cuál se desarrolla con el paso del tiempo. Ser cooperativista hace a uno más humilde y empático, capaz de colocarnos en los zapatos de otras personas”.
Manifiesta además que: “Gracias al cooperativismo tuve el acceso a desarrollar y potenciar mis destrezas y habilidades en concursos. También me abrió las puertas a formar parte, ya directamente, del equipo de trabajo que conforma la Cooperativa”.
Peña pone como un ejemplo a la medallista Katherine Rodríguez, quien inició sus prácticas de taekwondo en una escuela de la cooperativa y cumplió su sueño de poner en lo alto las atletas dominicanas, cuando trajo la Mención Oro, de Barranquilla.
Compromiso al emprender
El cooperativismo se destaca por ser de gran ayuda para las personas que no po- seen riquezas. George Hunter realizó su primer préstamo mediante una cooperativa, apenas terminó el bachillerato quiso emprender su propio negocio.
Indica que una de las cosas que más le sorprendió fue que, teniendo solamente 19 años y sin haber tomado ningún préstamo anteriormente, le concedieron uno con solo su firma, y sin necesidad de garante.
“Antes de averiguar en una cooperativa, había visitado un banco, me pedían documentos y como vivo fuera del país, eran cosas que no podía darles”, expresó Germania Rodríguez, quien se vio en la necesidad de tomar un préstamo cuando tuvo la oportunidad de comprar un apartamento. Se enteró de las facilidades cooperativistas por una recomendación y expresa sentirse bien con su decisión.