Aguinaldos y villancicos: EL TOQUE MUSICAL DE LA NAVIDAD
La Navidad es una de las épocas más bonitas y esperadas del año. Y una de las principales características son esas hermosas melodías que contagian felicidad y espíritu navideño a todos.
“Con mi burrito sabanero voy camino de Belén, si me ven, si me ven, voy camino de Belén”, “Campana sobre campana, y sobre campana una, asómate a la ventana, verás al niño en la cuna” y “Ha llegado Navidad, la familia alegre está celebrando noche buena en la paz del santo hogar”, son algunos de los versos que se cantan.
Un poco de historia
Los villancicos iniciaron en la edad media, en España, como forma sencilla y melódica de anunciar los acontecimientos que tenían lugar en la zona. No estaban ligados a la Navidad, sin embargo, años más tarde, debido a su popularidad y ritmo se comenzó a ver como un medio de divulgación de temas religiosos, y se comenzaron a contar historias a través de ellos, principalmente enfocadas en el nacimiento de Jesús.
Con el tiempo se fueron sumando voces e instrumentos, y la práctica se popularizó bastante, hasta convertirse en una práctica habitual en las iglesias, extendiéndose al hogar y las reuniones sociales durante la temporada de fin de año.
En inglés, la palabra villancicos se escribe “carols”, y proviene de “caroler”, en francés, que significa “bailar haciendo círculos”.
Entonar villancicos es una manera de las personas reflejar el espíritu navideño y la alegría que caracteriza la época y que está dentro de ellos.