¡Cuidado con sobrepasar los límites de la persuasión!
La advertencia fue hecha por la experta en ‘marketing’ experiencial y medios sociales Élia Guardiola, quien recientemente visitó el país para participar del congreso Mercadexpo, que desarrolla cada año la Universidad Iberoamericana.
Ala hora de realizar ‘marketing’ experiencial, lo primero que debe tener en cuenta una empresa o marca es saber a quién va dirigido ese producto o servicio y dedicar el tiempo suficiente a conocer muy bien a su audiencia.
En segundo lugar, tener objetivos muy claros de lo que quieren lograr. “Pese a que se puede tener una gran cantidad de objetivos y no pasa nada, no se pueden realizar todos a la vez porque al final no se cumplirá ninguno de forma efectiva”.
Así lo resalta la experta en el tema y medios sociales Élia Guardiola, quien recientemente visitó el país para participar del congreso de mercadeo Mercadexpo, que desarrolla cada año la Universidad Iberoamericana (Unibe).
De acuerdo con Guardiola, lo ideal es priorizar y lo más importante es saber diferenciar entre objetivos tangibles y no tangibles. Mientras los tangibles se pueden monitorizar muy bien, los intangibles no, porque se trata de las emociones que puedan lograrse con esa campaña. Por eso hay que tener en cuenta que las emociones son poco medibles, pero garantizan una fidelización con el cliente.
Desde su punto de vista, el ‘marketing’ experiencial se basa en dos pilares muy importantes a la hora de crear contenido valioso. Por un lado está la motivación y por otro la persuasión.
Pese a lo que muchos creen, que este tipo de ‘marketing’ manipula el cerebro, la experta resalta que no es así, sino más bien se trata de persuadir. “Básicamente cuando se persuade, las decisiones son tuyas y no de la marca. La marca te pone delante algo que sabe que tú puedes necesitar y a partir de ahí tú decides si realmente lo necesitas o no”.
Para no sobrepasar los límites de la persuasión, en primer lugar hay que conocer muy bien al público y saber que no es lo mismo comunicar para una generación de ‘millennials’ que para una de ‘baby boomers’.
“Los de la nueva generación se cansan rápido de las marcas, por lo que si ven que intentas venderles, se alejan antes. En el segundo caso, que se trata de personas entre los 50 y 70 años, si intentas venderles algo de forma muy frecuente e intrusiva, simplemente se alejan”, dice, al tiempo que destaca que por eso es importante saber dónde están los límites y saber el cuándo, cómo y por qué utilizar contenidos emocionales.
Para crear ese tipo de contenido dependiendo de las diferentes plataformas digitales, el primer paso es hacer un estudio de mercado dentro de las redes sociales y ver cuál generación abunda más en cada una.
Si lo que se busca es crear un impacto en personas entre 40 y 50 años, lo ideal es hacerla a través de plataformas como Facebook o Twitter, mientras que para lograr conectar con una generación más joven, debe optarse por Instagram o Snapchat.
Otro punto a tomar en cuenta es la cultura del país. “No es lo mismo crear una campaña de ropa interior para mujeres mayores en Irlanda, donde la mayoría de personas son muy religiosas, que hacerla en España, donde la gente es más liberal. Por eso es importante entender dónde está el consumidor”,
En ese orden, resalta que uno de los mayores retos que se enfrenta actualmente, por el contenido banal que impera en los medios sociales, es el hecho de humanizar la marca.
Según Guardiola, hay que entender que la humanización de una marca no se trata solo de hacer un contenido humanizado y emocional. Para lograrlo primero hay que humanizar al equipo que crea y genera ese sello.
Aprovecha para aclarar que la transformación digital va más allá de simplemente tener presencia en las diferentes plataformas digitales. “La transformación digital parte de la base del equipo humano que forma esa empresa o marca. Es exactamente lo mismo que pasa con la humanización”, concluye.