Cambios en la Ley General Educación
El ministro de Educación, Andrés Navarro, expresó su desacuerdo con la asignación de porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB) a un sector, incluyendo el 4% que actualmente se asigna a la educación
“Entiendo que la práctica de estar fijando porcentaje sobre el PIB para la gestión presupuestaria del Estado, debe cesar”, explicó.
Esto no debe ser un criterio de asignación de fondos a ningún sector, porque es una variable muy vulnerable, indicó.
“Hoy nos estamos gozando en un ámbito donde el PIB crece todos los años, pero el día en que el PIB comience a decrecer, aquellos que dependen de porcentajes podrían colapsar y eso es de alto riesgo”, precisó.
Apuntó, además, que como ministro de Educación está convencido de que la actual instituciolidad de esa cartera no garantiza la sostenibilidad del sistema.
“Tenemos que cambiar ese ministerio, hemos empezado la transformación total, y eso implica cambiar la Ley de Educación, que no la tenemos”, reveló, tras recordar que la actual ley del sector, la 66-97, tiene 21 años.
“Nosotros por eso comenzamos un proceso de preparación de la nueva ley, en una alianza pon el Consejo Económico y Social (CES) para que sea la sociedad y no el ministerio que la discuta”, añadió.
Insistió en que esa nueva ley tiene la responsabilidad de garantizar la revolución educativa que impulsa el actual gobierno, lo que implicaría una revolución profunda del ministerio y otra manera de gestionar los recursos,
Si no cambiamos la institucionalidad del sistema educativo no será posible darle sostenibilidad a esta inversión, consideró.
Los politécnicos
El dirigente peledeísta prometió que para un gobierno suyo los fondos públicos en ese sector estarán concentrados en la educación técnica, sea en la escuela, a nivel laboral o en el ámbito superior. “No daré dinero público para licenciatura, maestría o doctorado en desmedrado de la inversión en la educación técnica”, adelantó.
Yo he hecho un gran esfuerzo en ir cambiando los liceos por politécnicos porque creo que la formación laboral en el adolecente es determinante para desarrollo de las competencias fundamentales del currículo dominicano, agregó.