Indonesia reprime a los homosexuales
YAKARTA, Indonesia — Estás de acuerdo o en desacuerdo, preguntaba el examen: “Me sentiría incómodo al saber que el profesor de mi hija o hijo es homosexual”. O esto, es verdadero o falso: “La composición de género de una orgía sería irrelevante para mi decisión de participar”.
En las últimas semanas, se le ha exigido a los profesores extranjeros en algunas escuelas de Indonesia, que respondan a éstas y otras preguntas similares, en lo que ha sido anunciado como un examen psicológico. El objetivo es determinar su orientación sexual y actitud hacia los derechos de los homosexuales. Una regulación del gobierno, de 2015, prohíbe que las escuelas internacionales contraten a profesores extranjeros, que tengan “un indicio de conducta u orientación sexual anormal”.
Waadarrahman, funcionario del ministerio de Educación y Cultura que utiliza un solo nombre, dijo, “si el psicólogo dictamina que un candidato tiene una orientación sexual pervertida, la escuela definitivamente no contratará a esa persona”.
La prueba llega a medida que lesbianas, gays, bisexuales y personas transgénero enfrentan una creciente hostilidad en toda Indonesia.
En Bekasi Regency, que colinda con Yakarta, la capital, la Agencia de Protección a la Infancia informó en diciembre que había identificado 4.000 personas que sufren de la “enfermedad” de ser lesbianas, gays, bisexuales o transgénero.
Mohamad Rojak, comisionado de la agencia, indicó que la “desorientación sexual” era generada por “estilos de vida despreocupados” e instó a las personas en su lista a superar su condición mediante “terapia”. La Procuraduría General de Indonesia, responsable de hacer cumplir leyes contra la discriminación, señalaba en su sitio web, en noviembre, que los candidatos a empleos no deben tener “trastornos de orientación sexual”.
La homosexualidad no es ilegal en Indonesia, salvo en la provincia autónoma de Aceh. Pero el nuevo vicepresidente, Ma’ruf Amin, ha apoyado la penalización desde hace mucho tiempo.
El requisito de la prueba a los profesores fue adoptado, tras un caso de 2014, en el que un educador canadiense, Neil Bantleman, y seis indonesios, fueron acusados de abusar sexualmente de unos estudiantes, en la prestigiosa escuela Jakarta International School. Todos fueron encontrados culpables, según una prueba absurda, que incluía una afirmación de que Bantleman utilizó magia para hacer invisibles las escenas del crimen. En junio se le otorgó un indulto y fue liberado.
Waadarrahman indicó que la regulación de las pruebas aplica a 168 escuelas. Se les exige que tengan un psicólogo para certificar que los profesores no tienen algún trastorno de conducta o una “orientación sexual anormal”. Se deja que cada escuela contrate a un psicólogo para realizar el proceso de certificación. No hay un examen estandarizado.
Una escuela que aplicó la prueba en noviembre fue Mentari Intercultural School, en Yakarta. Incluía muchas preguntas de comportamiento, al menos 38, de las cuales trataban sobre la orientación sexual y actitudes hacia los derechos de los homosexuales.
Ifa H. Misbach, una psicóloga de Bandung, comentó que declinó la petición de una escuela de preparar un examen, debido a que “los psicólogos no pueden discriminar basados en la sexualidad”. Señaló que las actitudes hacia la homosexualidad son muy conservadoras en Indonesia, donde el ser gay es ampliamente considerado como una decisión, no como una característica determinada por el nacimiento”, puntualizó Misbach.
“Todos los días tienen que ocultarse en una sociedad, que los juzga negativamente”.
Preguntas sobre la sexualidad para profesores foráneos.