¿Puede este encierro desarrollar claustrofobia?
El Covid-19 ha cambiado la rutina de millones de personas. Sé que todos han visto alguna vez una de esas series que proyectan esto que está pasando. Pero eran simples guiones de películas. Eso lo decimos a manera de negación para desconectarnos del miedo.
Son muchas las sensaciones que nos causa lo que no podemos controlar. La claustrofobia, por ejemplo, es ese temor obsesivo de estar encerrado aun por poco tiempo, en espacios pequeños que muchas veces se puede convertir en una patología.
Las personas reaccionan diferente ante situaciones estresantes, incluso quienes se encuentren en espacios amplios, no estaban preparados para un quebrantamiento drástico de esa vida, que se llevaba de manera mecánica y que hoy , para propia protección, se pide un alto .
Esta interrupción ha logrado una visión de lo que dábamos por hecho, la libertad o libre tránsito, un trabajo, una familia, una salida social, los amigos, un todo, pero además del terrible temor al contagio, el encierro individual genera miedo y la frustración de no saber qué pasará con esta enfermedad, la cual no podemos controlar, aunque tenemos control de nuestra conducta para evitar el contagio.
En este aislamiento y claustro personal a pesar de estar rodeados de nuestro sistema familiar, los pensamientos, muchas veces producen preocupación, miedo, incertidumbre, cuestionamientos como: ¿qué pasaría si alguien me contagia? , ¿si se contagia un familiar cercano?. ¿si muere?, ¿cuánto durará? Todas son preguntas ciertas y que ocasionan más ansiedad, somatizaciones y sensaciones que pueden convertirse en una especie de “claustrofobia”
Pero no te atormentes, tenemos la ventaja de la tecnología que nos mantiene informados más rápidamente, pero además, la ciencia posee más avances que en esas otras ocasiones, lo que significa, que hay más recursos. Para tranquilizar nuestros pensamientos catastróficos, revisemos lo que pasa por nuestra mente .