DE VISITA EN EL HOTEL NICKELODEON & RESORTS PUNTA CANA
El COVID-19 ha dado grandes golpes al sector turístico nacional, y el resort Nickelodeon Hotels & Resorts Punta Cana que pertenece a Karisma, tuvo que cerrar sus puertas, como todos los de la zona.
Pero el pasado 5 de noviembre, reabrió sus puertas bajo la nueva modalidad pandémica y desde entonces ha transformado sus procesos. Ahora, se muestran cambios en la llegada y la estadía de sus clientes, en las comidas y en el sano disfrute vacacional.
La experiencia
Un equipo de periodistas del Listín Diario vivimos la experiencia. En la entrada al complejo estaba Yulissa, una de los agentes de seguridad que se encontraba esa mañana dando una ojeada tranquila al periódico con su protector facial y su mascarilla. No había visto el minibús blanco, pero segundos después descrubrió a su izquierda, la presencia colectiva y dijo “¿Ustedes son del Listín?”.
Luego de un repaso de nombres y una llamada a la central por Yulissa, por los extremos de las ventanillas del autobús se alcanzaban a ver unas pancartas con infografías haciendo llamados de atención por la pandemia, junto al letrero naranja de Nickelodeon colocado a manera de bienvenida.
Mientras el grupo se desmontaba cumpliendo los protocolos de sanidad, Edwin, el jefe de mayordomos del hotel, realizaba el proceso de sanitización del equipaje con un nebulizador.
La llegada
Mientras ingresábamos en la recepción Daniela y Jessy, entre risas, botellas de agua y toallas húmedas desinfectantes nos daban la bienvenida.
El piso marmolizado del elegante lobby era tan brillante que devolvía el reflejo de los allí presentes. Unas señalizaciones pegadas en el piso, indicaban respetar el distanciamiento.
En un sitio privilegiado del lobby relucía una pantalla con información adicional sobre el Covid-19. Su título: “Covid-19, lo que debes saber y lo que debes hacer”.
Los carritos blancos de transporte interno se desinfestaban antes de ser usados. Los pasajeros hacían fila en el lobby para registrar su llegada, mientras que otros esperaban turno en los cómodos sillones naranjas y amarillos, colores temáticos de Nickelodeon.
En ese momento, Bob Esponja, uno de sus reconocidos personajes, apareció con sus habituales saludos y fotos de bienvenida, respetando las medidas de distanciamiento.
Entre los procesos del check-in, había que depositar las cédulas personales en una bandeja para evitar tener contacto con los empleados de la recepción. El formulario incluía una declaración de síntomas de enfermedades respiratorias agudas; los lapiceros del llenado estaban esterilizados dentro de su plástico. Luego había que devolver los bolígrafos para higienizarlos. La temperatura corporal de cada uno se tomaba con un termómetro infrarrojo.
Tras este proceso, el equipo del Listín Diario fue invitado a desayunar en el restaurante Sugarcane, un espacio inspirado en los mercados tradicionales de Latinoamérica.
Las autoridades del hotel sólo mantenían abiertos dos de los seis restaurantes del complejo turístico debido a la pandemia.
Junto al Sugarcane operaba también el restaurante Zest con platos de cocina mundial, la cafetería Doppio, y uno de los principales bares abiertos era el Jazmin Swin-up Bar & Deck frente a la piscina y a pocos metros de la playa.
Algunos restaurantes
Después del desayuno, el equipo del Listín visitó los restaurantes, conectados todos en cadena circular. El conocido como Kitchen 23 by Le Chique, (cerrado), y Verdello, que en su entrada mostraba una pared con gavetas de distintos tamaños y colores, era otro