Una alternativa ‘mágica’ a los cruceros alrededor del mundo
Atracciones.
ca y otros destinos. Pero con la pandemia este invierno no fue posible hacerlo, ya que ninguna línea de cruceros pudo navegar en vueltas al mundo.
Desesperados por poder disfrutar de los placeres culturales de un viaje alrededor del mundo, nos dimos cuenta de que aún existe una posibilidad -mágica- de disfrutar de algunos de los sabores y experiencias internacionales en una “mini vuelta al mundo”. Y no es necesario obtener múltiples visas, ni tomar vuelos largos o travesías ambiciosas. Simplemente hay que emprender rumbo a Epcot y otros parques y centros vacacionales del recinto de Disney World en Orlando
por solamente un día o, si se dispone de más tiempo, por unos cuantos días.
¡Cantinflas fue alrededor del mundo en el celuloide en 80 días pero nosotros podemos disfrutar en mucho menos tiempo!
Itinerario de un día
El punto de partida ideal es la atracción Soarin’ (Volando alto) en el pabellón The Land (La Tierra) de Epcot. Esta atracción es precisamente una jornada alrededor del mundo en planeador colgante que lleva a los visitantes a ver la Torre Eiffel en París, las Pirámides de Egipto, la Gran Muralla de la China, las cataratas del Iguazú en la América del Sur, el Taj Mahal en la India, los majestuosos Alpes en Suiza, hasta un grupo de elefantes marchando hacia el Monte Kilimanjaro en Tanzania y veleros navegando junto a la Casa de la Ópera y el Puente de Sídney en Australia. ¡Es una jornada a muchos de los parajes y paisajes más icónicos del mundo en cinco minutos!
De aquí, los pabellones internacionales del World Showcase (la sección de la Vitrina del Mundo) invitan a continuar una “vuelta al planeta” en un día. A mí siempre me encanta, entre otras cosas, escuchar al Mariachi Cobre, del pabellón de México, ver las películas y atracciones en los pabellones de Canadá, China, México y otros, comprar rico té en el Reino Unido, sacarme una foto frente a la Torre Eiffel del pabellón de Francia, y almorzar pollo teriyaki en el Katsura Grill del pabellón del Japón después de sacar fotos a su escénica puerta Torii junto al lago de la Vitrina del Mundo. El Katsura Grill es un restaurante con mesas al aire libre en un bello jardín tradicional japonés (bello, y muy apropiado para comer en tiempos de pandemia).
Continúo mi “vuelta al mundo mágica” haciendo compras de golosinas incluyendo chocolates y unas deliciosas rositas de maíz con caramelo en Karamell-Kuche, en la sección de Alemania, un pabellón con bellos estilos de arquitectura típica tradicional y torre de reloj como el de una plaza alemana de los 1500 y una fuente con la estatua de San Jorge venciendo al dragón. Y le doy un vistazo a la artesanía, incluyendo cerámica y tallados, en el exótico bazar del pabellón de Marruecos, y a las lanas en el pabellón de Noruega.
Luego hago una merienda en Les Halles en el pabellón de Francia, una panadería y dulcería tradicional que ofrece deliciosos dulces, baguettes, croissants y emparedados. En China le saco fotos al Templo del Cielo (Temple of Heaven) inspirado en el de Beijing. Para la cena, “viajo” a Italia para disfrutar de calamares, ensalada, espaguetis y gelato en una mesa al fresco del Tutto Italia Ristorante en el pabellón italiano y me deleito con la vista de la torre de campanario de 83 pies de altura del pabellón que está inspirada en la torre de la Plaza de San Marco en Venecia.