Nuevas normas
Nuevas reglas en el béisbol de las grandes ligas serán aplicadas a partir de la próxima campaña. Para los puritanos resulta difícil aceptarlas, dicen que desnaturaliza el juego. Sin embargo, no creo que impacten como lo hizo la del bateador designado, implantada en 1973. Entonces hubo también protestas, pero esa innovadora regla contagió al resto del mundo que practica este deporte que la aplicó al unísono, con excepción de la liga Nacional que vino a hacerlo el año pasado, cincuenta años después.
La norma resultó beneficiosa y su mayor aporte fue alargar la carrera de muchos veteranos abriendo oportunidades a magníficos bateadores que no tenían habilidad defensiva. Sin ella jamás hubiesen alcanzado a colocar sus nombres en Cooperstown hombres como Frank Thomas, Paul Molitor, Edgar Martínez, Jim Thome y David Ortiz.
Las Grandes Ligas nacieron en 1876 y desde entonces se han estado realizando cambios, que sin afectar la esencia del juego se han adaptado a los tiempos. Por eso es necesario, siempre, ubicar la época cuando se emite un juicio, se realiza un análisis o se juzga un jugador, sobre todo al compararlo con otro.
No fue igual el tipo de juego del siglo XIX al que comenzó a aplicarse a partir de 1901. Se cambió el tipo de bola a utilizarse en 1920. En 1935 se iluminaron los estadios y se pudo jugar de noche, desde 1947 se derrumbó la infame barrera racial, Dodgers y Gigantes abrieron el camino a California en 1958, en 1961 comenzaron a expandirse los circuitos incorporando nuevos mercados, se han construido mejores estadios, el avance científico y adelantadas técnicas de desarrollo físico ha creado un atleta con mayor habilidad, la nanotecnología aplicada a las estadísticas permite el acceso a una pertinente información que ha cambiado la forma de generar una estrategia y la utilización de los recursos humanos para alcanzar el objetivo.
En fin, el béisbol no puede soslayarse de la sociedad, tiene su propia dinámica y debe adaptarse a los tiempos, por eso es imprescindible dividir su devenir en las correspondientes etapas. En 2023 se inicia otra.
Las nuevas reglas son necesarias, no trasforman la esencia del juego.