Guy Philippe alista su entrada “inminente” a Puerto Príncipe
respaldan una intervención militar en Haití, con apoyo de Estados Unidos y Naciones Unidas, tienen “un plan bien montado”. Asegura que pedir una intervención extranjera en su país sólo sirve para “manchar nuestra soberanía, y mantener en el poder, bajo el mismo estatus, a los que asesinaron al presidente Jovenel Moise...” to está consciente de la importancia que tiene Puerto Príncipe para sus fines políticos, y ha jurado continuar con su plan d derrocar al gobierno, asegurando estar “casi listo” para regresar al departamento Oeste. a Puerto Príncipe”, afirmó Philippe, deportado de Estados Unidos tras cumplir seis años de cárcel por blanqueo de dinero proveniente del tráfico de drogas. de las manifiestas buenas intenciones de Philippe. Este puede ser el motivo del brusco cambio en la retórica del discurso de este exmilitar golpista, que ahora, tratando de despejar temores, rechaza cualquier idea en su movimiento relacionada con “baño de sangre”. En cambio, explica que su “revolución” sólo quiere alcanzar “un cambio en las condiciones de vida de la población, una reducción de la tasa de desempleo y conseguir y atraer inversores extranjeros”. Este propósito de Philippe es contradictorio, porque sus prácticas originarias y actuales han sido de violencia e inestabilidad, factores que afectan la inversión nacional y extranjera. El crimen y la violencia reducen la competitividad y genera ineficiencias e incertidumbre, mientras las variantes menores del crimen también tienen efectos nocivos para la inversión, al recurrir al secuestro, la extorsión y el robo a empresas, ahuyentando así a los inversores.