DESAFÍOS HÍDRICOS: EL CAMINO HACIA UNA GESTIÓN SOSTENIBLE EN RD

En la búsqueda de una gestión más sostenible del agua, República Dominicana enfrenta retos significativos. Este recurso precioso debe ser protegido y gestionado de manera sostenible para garantizar su disponibilidad a largo plazo. Sin embargo, el país enfrenta diversos obstáculos en este camino hacia una administración eficiente del agua. Desde la discrepancia entre el costo real de producción y distribución y las tarifas pagadas por los usuarios, hasta la necesidad de mejorar la infraestructura de agua potable y saneamiento en todo el territorio nacional, los desafíos son variados y requieren de acciones concretas para ser abordados de manera efectiva.

Expertos en ingeniería civil y ambiental como Miguel Bachá, y el director de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD), Felipe Suberví, comparten su visión sobre las iniciativas en curso en el país para mejorar el acceso al agua potable y garantizar su uso eficiente, así como las propuestas para enfrentar estos desafíos.

Miguel Bachá, especializado en ingeniería sanitaria y ambiental, destaca la diferencia en la percepción y el pago del agua entre países desarrollados y en vías de desarrollo, señalando que, en los países del primer mundo, los usuarios pagan por el costo real del líquido, lo que fomenta un consumo más responsable y una mejor prestación del servicio. El experto enfatiza la importancia de los sistemas de agua potable y saneamiento (APS) para la salud pública y el bienestar comunitario, destacando que la cobertura total es esencial para garantizar estos beneficios. Bachá también menciona los proyectos en curso, como el Pacto por el Agua, implementado con el propósito de impulsar la sustentabilidad y seguridad hídrica en un período de 15 años (2021-2036), que se discute en la Mesa del Agua, con una inversión prevista de 8,000 millones de dólares para mejorar la cobertura y la calidad del

agua en todo el territorio.

El valor adecuado

Bachá hace hincapié en la necesidad de asignar un valor conveniente al agua para promover su uso eficiente, proponiendo la implementación de la micro medición en cada hogar para fomentar la conciencia sobre el consumo y la conservación del recurso. Además, destaca la importancia de la educación ciudadana en todos los niveles para sensibilizar a la población sobre la importancia del agua y su impacto en el medio ambiente. En cuanto a la calidad del líquido, Bachá subraya que las instituciones responsables, como el Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (INAPA) y las Corporaciones de Acueducto y Alcantarillado (CORAA), realizan controles que garantizan que el agua suministrada cumpla con los estándares de potabilidad establecidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS).

Importancia de gestionar

El ingeniero aboga por una gestión sostenible que incluya inversiones significativas en infraestructura y educación, así como una valoración apta, para garantizar un suministro seguro y equitativo de agua potable y saneamiento en toda la República Dominicana. “La gestión sostenible del agua implica un plan maestro de inversión a 15 años para alcanzar una cobertura total de agua potable y alcantarillado. Esto debe acompañarse de un programa de educación ciudadana en todos los niveles para crear conciencia sobre su importancia y la necesidad de su uso responsable”, indica el experto.

En cuanto a la importancia de la gestión sostenible, el director de la CAASD, Felipe Suberví destaca que “nos garantizará preservar nuestros ecosistemas hídricos y adoptar medidas para combatir el cambio climático.” Además, enfatiza que una gestión eficiente “facilitará disponer de agua para los diferentes usos, contribuyendo de manera decisiva al

crecimiento económico del país y garantizando este recurso para las futuras generaciones”.

Conservación del agua

Uno de los principales desafíos que enfrenta el Gran Santo Domingo es la conservación del agua. Suberví menciona la necesidad de reducir el índice de agua no contabilizada, mejorar la cobertura del alcantarillado sanitario y agua potable, y disponer de fuentes de abastecimiento con almacenamiento para mitigar los efectos de las sequías cíclicas. Señala la importancia de incrementar la producción por gravedad y reducir los sistemas por bombeo, así como aumentar la cobertura de tratamiento de aguas residuales para disminuir la contaminación de los acuíferos. En cuanto a los proyectos e iniciativas en curso, Suberví menciona varios enfoques clave. Por ejemplo, la implementación de un proyecto de control y monitoreo en línea de los acueductos de la CAASD permitirá una toma de decisiones más informada. También destaca un plan de gestión de demanda en Santo Domingo Este y un proyecto piloto en los sectores de Naco, Piantini y Serralles, que utilizan tecnología de medición en línea para mejorar la eficiencia del suministro de agua y reducir el índice no contabilizada. La calidad del agua es otra preocupación importante. Suberví enfatiza la importancia de la revisión continua de los conocimientos sobre el agua y el monitoreo regular de las fuentes de captación y las redes de distribución para garantizar la potabilidad del líquido. Para mejorar la eficiencia de su uso en diferentes sectores, propone una serie de medidas, como la gestión eficiente del suministro de agua potable, el fomento del uso de aparatos sanitarios de bajo consumo y campañas de educación ciudadana.

En la agricultura, sugiere cambiar al riego por goteo y dotar de tecnología a los sistemas de riego, mientras que en la industria destaca la importancia de tecnologías que ahorren agua y políticas de tratamiento de aguas residuales para su reúso en otros procesos, visión que también comparte el ingeniero Miguel Bachá. “Una de las formas más útiles de mejorar la eficiencia del agua en las operaciones industriales es mediante la utilización de tecnología y equipos que ahorren agua, además, adoptar políticas de tratamiento de las aguas residuales que permitan su reúso en otros procesos productivos, esto se logra con mayor facilidad si se disminuye el uso de sustancias químicas. En adición a lo anterior, se debe potencial el uso de los sistemas de limpieza en seco”, sostiene Suberví.

Tecnologías emergentes

En cuanto a las tecnologías emergentes, el director de la CAASD menciona la digitalización de los procesos del ciclo integral del agua con dispositivos inteligentes que permiten una reducción considerable en el consumo, como aireadores para grifos, duchas eficientes, equipos para detección de fugas y con tecnología de ultrasonido para evitar la proliferación de algas en los embalses.

Participación comunitaria vital

De igual manera resalta el papel crucial de la participación comunitaria en la gestión sostenible del agua, señalando que las comunidades locales pueden aportar ideas y soluciones innovadoras y empoderarse participando activamente en los procesos de toma de decisiones. Sin embargo, identifica la ausencia de marcos reguladores claros y la contaminación de los recursos hídricos como obstáculos importantes para la implementación efectiva de proyectos de gestión sostenible del agua en el país.